Utilizando ADN de hongos luminiscentes, investigadores de la Academia de Ciencias de Rusia lograron obtener plantas de tabaco que brillan fuertemente en la oscuridad.
Lo que hicieron fue combinar el ácido cafeico, una molécula presente en casi todas las plantas, con una enzima que les permite emitir unos 10.000 millones de fotones por minuto, de manera que las hojas emiten su propio brillo.
El descubrimiento, publicado en Nature Biotechnology, permite brindarle nuevas herramientas de observación a los científicos para analizar el funcionamiento de las plantas, dado que la bioluminiscencia se mantuvo durante todo el ciclo de la planta.
La bioluminiscencia es un fenómeno bastante extendido en la naturaleza y hay varios otros organismos que la presentan. Las medusas son un caso típico.