El viernes en la apertura de los Juegos Olímpicos París 2024, que duró cuatro horas y contó con diversas presentaciones de artistas como Celine Dion y Lady Gaga, presento criticas referidas a la presentación de Philippe Katerine y Barbara Butch, acompañado de figuras de la comunidad LGBTQI+ imitando la "Última Cena" de Leonardo Da Vinci.
Philippe Katerine, cantante español, se presentó pintado de azul y casi desnudo encima de una bandeja sobre la mesa, representando a Dionisio. "La interpretación del dios griego Dioniso nos hace conscientes del absurdo de la violencia entre seres humanos" sostuvieron desde su cuenta de X los organizadores del evento.
Marion Maréchal, sobrina de Marine Le Pen, diputada del parlamento europeo de ultraderecha critico fuertemente la performance. "A todos los cristianos del mundo que asisten a la ceremonia #Paris2024 y se sienten insultados por esta parodia drag queen de la Última Cena, sepan que no es Francia la que habla, sino una minoría de izquierda dispuesta a cualquier provocación".
Anteriormente se había generado controversia por la presencia de Aya Nakamura en la inauguración del evento. Les Natifs, colectivo francés de ultraderecha, había publicado una foto donde se leía “esto es París, no el mercado de Bamako (la capital de Mali, donde nació la cantante)" buscando que desista de asistir.