"La familia de Bohemian Groove acompaña a la Rip Gang en este momento de profundo dolor, con la paz de que su legado perdurará POST MORTEM" se lee en el obituario de REY, Dillom del 30 de noviembre. Así despiden al artista de 20 años tras el lanzamiento de su álbum debut que a la vez suma la característica de póstumo.

No, no literalmente. Dylan León Masa encarna a Dillom artísticamente y con el lanzamiento de este material cierra una etapa de su vida. En los 18 tracks que abarca "POST MORTEM" se encarga de destruir todo aquello que empezó a fundarse sobre el Dillom que cantaba "Superglue" y "esto es trash, lo tuyo es basura" allá por 2019. 

El disco reúne todos los condimentos: es cinematográfico, inesperado, soothing (googlealo), gede, y cualquier adjetivo que describa lo que sentís cuando un bajo entra brusco y a la vez nice y hace que tu nariz se arrugue mientras sonreís apretando los dientes.

En cuanto a géneros no podemos encasillarlo en uno. La paleta de sonidos es tan amplia que si arranco a tirarte las influencias identificables (Daft Punk/N.E.R.D./Eminem) no termino más. Mandale play mientras leés esta nota. Aunque no sé si este disco se merece hacer algo más que únicamente escucharlo.

"Mirá si me muero ahora que por fin pude cumplir mis sueños", pensaba el Dillom encuarentenado de 2020. Los casos de raperos norteamericanos fallecidos a los 21 años, entre ellos Juice WRLD, pegaron fuerte en su psiquis, que lo atormentaba con pensamientos oscuros, angustia y ansiedad. 

Su 2019 había sido una escalada exponencial. "Fue el año en que explotó mi carrera", le cuenta a Filo.News desde el Estudio Cromo. "Pintaba que el año que seguía iba a ser una locura. Yo venía con la idea de hacer un disco porque era el próximo paso lógico y ya tenía un par de demos armados".

La pandemia de coronavirus cortó todo intento de avance y, con ese parate, llegó la resaca de la fama. "Ese año no había tenido tiempo ni para pensar, pasaron tantas cosas que yo estaba en un cumpleaños. Después de eso, me empezó a agarrar un miedo irracional a la muerte". Así surge POST MORTEM. "Nació la idea de sacar un disco póstumo pero en vida. Terminó teniendo un sentido autobiográfico. Narro mucho la muerte, la vida, lo bueno, lo malo. La dualidad".

Con todo ese bagaje mental dando vueltas, el germen del disco empezó a gestarse. Primero los demos fueron a parar a los oídos de Fermín Ugarte, músico y a la vez A&R/curador de Bohemian Groove, el sello discográfico que abrieron con algunos integrantes de la Rip Gang. Evar, productor, había trabajado los beats de esas primeras versiones, y en un viaje a Chascomús decidieron profundizarlas. 

Corría diciembre de 2020 y todavía faltaba por sumarse otra de las piezas clave de este disco: Lamadrid. "Fermín me dice ''Che, llevemos a este pibe Luis que la tiene muy clara'. Vino y resulta que era tremendo capo y dije '¿Cómo no me lo presentaste antes?'". Chascomús 2020 "fue un viaje muy especial porque es donde consolidamos el equipo de los cuatro y donde nació gran parte del sonido y del disco en sí".

"Siento que es el dream team. Fermín se encarga de la producción ejecutiva y en la parte musical también aporta muchísimo. Evar es la parte más beatmaker dura de trap, nos baja un poco a tierra para no hacer cualquier cosa. Lamadrid es un puto hacker que puede hacer cualquier cosa con la computadora y tiene muy buen críterio". 

Los deadlines los corrían y el trabajo no estaba terminado. Salió Córdoba 2021 y ahí se sumó NoDuermo, director creativo de Bohemian Groove, "para que se nutra del disco y después pueda plasmar eso en lo visual". Se terminó en el estudio El Árbol unos cuatro meses más tarde.

Las letras que contiene este material discográfico llevan la picardía y el humor negro que caracteriza a Dillom, pero esta vez la vulnerabilidad se abrió paso entre esas dos y, por primera vez, podemos apreciar qué siente Dylan y no qué se le ocurre decir a Dillom sobre lo que siente Dylan.

"'220' es mi tema preferido porque es el más introspectivo. Realmente me cuesta escribir cosas así. En persona, en la vida, me cuesta hablar de mis cosas. No soy alguien que se pone triste y te cuenta sus problemas. Siempre trato de contar todo con humor o evitar esos temas. Después de varios años de terapia estoy empezando a soltar", dice. Y agrega "Siento que logré enfrentar lo que siento sin que me dé verguenza o que me mate del cringe. Creo que logré hacerlo de una forma bastante cool". 

El viaje de "POST MORTEM" no termina ahí. Primero pasó por el mix de Santiago de Simone y tuvo una última parada en el Bernie Grundman Mastering de Los Ángeles de la mano de Mike Bozzi AKA quien masterizó trabajos de Tyler, The Creator, Kendrick Lamar y más recientemente, el soundtrack de la serie del LOL, "Arcane".

La mayoría de los tracks del disco presentan a Dillom en solitario porque las collabos son las justas y necesarias. L-Gante nunca sonó tan clean, Muerejoven hace de coach sobre un beat con tintes techno bien picantes y Saramalacara explota su Avril Lavigne/Blink 182 style en el tema más cool y melódico del álbum. Ah, y Mario Pergolini se rompió esa locución para la oscura "Demian". 

Este disco no se parece en nada a lo que el Dillom de 2019 tenía pensado para su debut. "Si no hubiera habido pandemia, el disco que hubiese hecho sería una chotada completamente", reflexiona. "Venía laburando de una forma que me servía pero sino pegaba una evoloción me iba a quedar estancado. Fue gracias a Fermín y gente de la que me empecé a rodear que viene de otro palo de la música donde todo es más fino que hice el cambio". 

"Está buenísima la escencia del trap de decir 'Grabo así nomás con micrófono y lo subimos mañana a YouTube' pero está bueno plasmar esa esencia en algo que sea una evolución piola y esté a la altura de algo profesional. No te podés quedar siempre en la de SoundCloud. Por ahí me van a matar algunos que lean esto, pero entiendo que si querés construir una carrera a largo plazo, tener 40 años y seguir haciendo música y vivir de esto, es la mentalidad que tenés que tener", sigue.

La invitación al funeral de Dillom (2000 - ∞) pedía que vistamos de luto. Velas, fotos al estilo yanqui y coronas de flores cubren el lugar. Un séquito carga un cajón hacia el escenario del que emerge Dillom, salido de la muerte, a interpretar sus canciones póstumas. Un shot por eso.

"'POST MORTEM' es muy especial porque es mi primer disco. No sé qué signficará para mí en 10 años, por ahí te digo 'Es una peteada'. Hoy en día es muy especial, es todo, es mi mini producto final de mi carrera hasta ahora, todo lo que vengo procesando desde que arranqué, cuando subí mi primer tema era 2018. Vengo hace mucho antes haciendo música y beats y que no me salga una, estando en un grupo, en otro. Desde los 15 años. Ahora tengo 20, cumplo 21 en un par de días. No es tanto, pero para mí es la mitad de mi vida, y llegar a cerrar esto es cerrar una etapa entera de mi vida".