¿Querés tener una relación feliz? Según la Universidad Martín Lutero de Halle-Wittenberg (MLU) y la Universidad de Bamberg, para ello hay que asegurarse que ambas partes de la pareja sientan que pueden decidir sobre cuestiones que son importantes para ellos.
El estudio, publicado en la revista Journal of Social and Personal relationships por ambas universidades, sostiene que el poder medido por los ingresos, por ejemplo, no parece jugar un papel importante; en cambio, la forma en que los amantes perciben la dinámica de poder es más importante para la satisfacción de la relación.
El poder se trata de ser capaz de influir en las personas y resistir con éxito los intentos de otros de influir en vos, pero no solo juega un papel en la política o los negocios, sino también en las relaciones románticas. Y esto es lo que estudian Robert Körner y Astrid Schütz, cómo el poder y la percepción del mismo impactan en las parejas.
Para ello, entrevistaron a más de 80 parejas heterosexuales que habían estado viviendo juntas durante al menos un mes. Los encuestados tenían entre 18 y 71 años y habían estado en relaciones durante un promedio de ocho años.
El equipo investigó cómo el poder real y percibido influye en diferentes aspectos de una relación, como la satisfacción y el compromiso, y cómo afectan la calidad de esa relación. La encuesta incluía preguntas sobre la admiración por la pareja, confianza, satisfacción sexual, sentimientos de opresión y restricción, así como sobre compromiso y voluntad de invertir en la relación. "También calculamos el equilibrio de poder para conocer hasta qué punto los rasgos de cada pareja eran similares entre sí", explica Körner, investigador del Departamento de Psicología de la MLU.
Los resultados mostraron que los hombres todavía tenían en promedio más "poder posicional", término que en la publicación usan para referirse a mayores ingresos y mayor educación; mientras que la necesidad de tomar decisiones en general también fue más fuerte entre los hombres. Sin embargo, estos dos factores no parecían influir en la calidad de la relación.
Las parejas más felices fueron aquellas en las que ambos reportaron un alto sentido de poder personal. "Parece que el sentimiento subjetivo de poder y la sensación de poder actuar libremente impactan significativamente en la calidad de la relación", concluye Körner. En la mayoría de las parejas participantes, detallan, ambos miembros afirmaron ser capaces de hacer valer sus preferencias a la hora de tomar decisiones que son importantes para ellos.
Schütz, investigadora de la personalidad de la Universidad de Bamberg, sostiene que esto no es necesariamente una contradicción. "Tal vez este sentimiento se extienda a diferentes aspectos de la relación. Mientras que uno de los dos puede querer decidir a dónde ir de vacaciones, otro elige dónde ir a cenar".
"Una cosa a tener en cuenta es que nuestra muestra incluía parejas bastante felices, lo que favorece una negociación efectiva. En otras asociaciones, definitivamente existe un potencial de conflicto a este respecto", finaliza.