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Actualidad #Dólar

Se cumplen 28 años del 1 a 1: ¿En qué consistió la Convertibilidad?

La inflación es un problema de larga data en nuestro país y hubieron muchos planes para contenerla, hace 28 años se promulgó la Ley de Convertibilidad y en Filo.News hablamos con un especialista para saber todo sobre este plan que terminó en el Argentinazo. 

Se cumplen 28 años del 1 a 1: ¿En qué consistió la Convertibilidad?

El 27 de marzo de 1991 fue decretada la Ley de Convertibilidad del Austral por el Congreso Nacional, fue durante el gobierno de Menem y con Domingo Cavallo como ministro de Economía. La convertibilidad estuvo vigente por casi 11 años, hasta que se derogó en enero de 2002 después de que un Presidente se fuera en helicóptero y otro durará una semana en el poder. 

Si bien el fin de la convertibilidad es conocido por todos los ciudadanos (me tomo el atrevimiento de excluir centennials) sus orígenes no están tan presentes y menos aún sus implicancias y limitaciones. Aunque con el dólar arriba de $43 es difícil de pensar todavía se escucha en ciertos lugares, casi como una expresión de deseo, "que vuelva el uno a uno".

Más allá de los viajes a Miami y la entrada indiscriminada de chucherías por $2 la Ley de Convertibilidad fue un plan para controlar un problema recurrente en la economía argentina: la inflación.

Recordemos que el aumento de precios de 2018 fue el más alto desde el año que se implementó este famoso esquema, por lo que estudiar este, y otros, planes de estabilización de precios tienen una importancia central para la argentina de hoy.

A 28 años del 1 a 1 Filo.News entrevistó aJoaquinWaldman, economista de la UBA y analista en Ecolatina, se especializa en los distintos abordajes que tuvo la inflación a lo largo de la historia económica Argentina.

¿Qué fue la convertibilidad? 

La convertibilidad fue una política económica implementada por Cavallo que puso todas las herramientas a disposición de un único objetivo: terminar con la hiperinflación.

Para esto, usó un tipo de cambio fijo, más conocido como el 1 a 1. En paralelo, aplicó una apertura comercial y financiera que permitió usar el dólar para todas las operaciones económicas y prohibió, por ley, que el Banco Central financie políticas fiscales expansivas. 

¿Cuáles fueron sus beneficios? 

La convertibilidad aplacó la inflación. Se pasó de 1344% de hiperinflación en 1990 a 25% en los primeros 12 meses posteriores a su aplicación. La estabilidad permitió al país volver a crecer luego del magro desempeño económico de los años 80.

¿Cuáles fueron sus limites?

El 1 a 1, en conjunto con la apertura comercial y financiera, produjeron el abaratamiento de las importaciones. Esto deterioró la industria nacional, incentivando las compras al exterior frente a la producción local.

En simultáneo, al autolimitar las capacidades estatales, el Gobierno no pudo administrar los problemas externos ni hacer políticas contracíclicas. Así, los noventa fueron años de fuerte aumento del desempleo. 

¿Crees que se podría volver a implementar un esquema de este tipo?

Creo que hay aprendizajes que hay que hacer para no repetir un esquema así. En primer lugar, dolarizar los contratos domésticos vuelve a nuestra economía muy vulnerable frente a movimientos del tipo de cambio.

Además, el peso de la deuda pública en moneda extranjera debe ser tenido en cuenta a la hora de sostener un dólar barato. Por último, el Gobierno no puede “atarse las manos” sino que debe tener márgenes de acción para poder ejecutar políticas.

¿Cómo describís el plan actual para reducir la inflación?

El Banco Central está manteniendo fija la cantidad de dinero en circulación, golpeando a la actividad económica. Este esquema es recesivo, además de insuficiente para terminar con los aumentos.

Por caso, hay poco control sobre el dólar, la variable que todos miran a la hora de establecer los precios. Al mismo tiempo, faltan políticas de ingresos que ayuden a coordinar la desinflación.