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Luego del insólito hecho que tuvo lugar en Córdoba capital, donde a un vendedor ambulante le incautaron los panes que comercializaba y luego se los comieron, en esta ocasión un cafetero fue detenido durante 12 horas por vender su infusión en la calle.

El hecho tuvo lugar en el barrio porteño de Flores y, gracias al video filmado por una señora que pasaba por allí, existen registros del momento en que arrestaban al vendedor.

El joven, de nombre Lucas y padre de 4 hijos, habló con la señal de noticias C5N y se refirió al caso en el que las autoridades lo aprehendieron sin una orden de detención, lo mantuvieron en un calabozo por 12 horas y le quitaron sus carros, termos y tuppers. 

"La policía dice que estaba en la vía pública y que no se puede hacer eso. Que estés quieto está prohibido, pero la venta ambulante está permitida", declaró en un diálogo telefónico con el canal, aclarando que él se encontraba dentro de una galería e incluso había guardado su carro dentro un local vacío para que no se lo lleven.

"Según ellos, yo agredí tanto a la policía como a los espacios públicos. Me aferré a mi carro para que no me lo saquen y me esposaron. Ahora me quedó una causa abierta, por lo tanto, tengo antecedentes", se lamentó Lucas.

Su mujer acababa de dar a luz cuando él fue encerrado en el calabozo de una de las comisarías de la zona, motivo por el cual se perdió el nacimiento de su cuarto hijo y ahora se encuentra "sin laburo hasta que se pueda comprar otra cosa".

El vendedor ambulante denuncia que no es la primera vez que le sucede esto: "En enero ya me habían sacado también. Estaba adentro de una galería y se me subieron 4 personas encima para sacarme las cosas", acusó.

"He buscado respuestas: para trabajar te piden un permiso que he buscado en Espacios Públicos y ahi mismo te dicen que no existe", se quejó Lucas, que al aire se enteró de que existe el sindicato de vendedores ambulantes, donde le aconsejaron que se asesore.

"Camino para todos lados, brindo servicio a la gente que no puede salir del local, le llevo el café a la puerta un poco más barato de lo que lo cobraría la competencia pero no me paro en frente a un bar a vender un café", sostuvo.

"Me parece injusto estar 12 horas preso por vender café", denunció

"Sostengo a mis 4 hijos vendiendo café. Gano para darme el lujo de que mis hijos coman todos los días y que puedan comer lo que ellos quieran", concluyó.