El verano suele traernos alegría y felicidad con la llegada de las vacaciones. Pero el calor permanente y la exposición constante al sol puede que arruinen el tan ansiado descanso.

Beber agua contribuye al mantenimiento de la regulación normal de la temperatura del cuerpo. Si la pérdida de agua no se repone, puede llevar a la deshidratación, lo que causará dolor de cabeza, cansancio y fatiga.

Algunas recomendaciones: 

• Tené siempre a mano una botella o vaso con agua. Teniéndola cerca estarás mucho más pendiente de mantenerte hidratado
• Si sos físicamente activo, la cantidad de líquido que necesitás es aún mayor. Es importante beber mucha agua para evitar los golpes de calor. 
• Organizá descansos regulares para que cuando estés estudiando, trabajando o hagas deporte, consumas suficiente agua, sobre todo si hace calor.
• Tené siempre agua en tu refrigerador para cuando quieras agua fresca.
• Comé frutas y verduras que tienen alto contenido de agua (como la sandía, la naranja, el tomate), así te mantenés saludable y a la vez bien hidratado.