Un día después de los primeros ataques del grupo Hamás que constituyeron el inicio del conflicto bélico con Palestina, el gobierno de Israel dio a conocer la primera cifra oficial de fallecidos y ciudadanos secuestrados que fueron trasladados hacia la Franja de Gaza.

Las imágenes desoladoras que recorrieron el mundo en las últimas horas solo fueron un pequeño reflejo de las atrocidades que tuvieron lugar este último fin de semana en Medio Oriente. A partir del inesperado ataque con el que el grupo Hamás sorprendió al gobierno israelí, bombardeos cruzados se llevaron ya la vida de más de mil personas en un conflicto que no asoma un pronto final.

"Los números siguen subiendo y con ellos nuestra tristeza. Nuestras plegarias están con las familias de los secuestrados, asesinados o heridos por Hamas", señaló en un comunicado la Oficina de Prensa del Gobierno de Israel, y luego acompañó las palabras con las cifras oficiales que indican más de 700 ciudadanos israelíes fallecidos hasta el momento, más de 100 secuestrados y más de dos mil heridos.

Por su parte, el portavoz internacional de las Fuerzas de Defensa de Israel, Richard Hecht, señaló que "no fueron contra objetivos militares, fueron contra civiles; fueron a por abuelas, niños, bebés. Los números no tienen precedentes".

Con enfrentamientos continuos en la Franja de Gaza luego del primer ataque, el Ministerio de Sanidad palestino declaró que, producto de la ofensiva del ejército israelí, al menos 370 ciudadanos palestinos perdieron la vida y más de dos mil resultaron heridos.