Este 28 de junio se festeja en todo el mundo el Día del Orgullo para conmemorar los disturbios de Stonewall en Nueva York en 1969. Este acontecimiento es el punto de partida del movimiento moderno por los derechos LGBTQ+.

Desde Filo entrevistamos a Miuka Underground, una de las drag queens más reconocidas y talentosas de nuestro país. Primero porque no hay nada más representativo y artístico para el mundo gay que una drag y segundo porque entendemos que hay mucha confusión con estos términos. Así que en esta nota intentaremos, junto a Miuka, esclarecerlos.  

El origen etimológico de la palabra drag se remonta a Shakespeare. Como las mujeres tenían prohibida cualquier actividad pública, eran los varones quienes las representaban en el teatro. “Drag era la forma que tenían de poner en los guiones, una manera de marcar quien iba vestido de mujer y quién no, ya que las mujeres no actuaban. Entonces los hombres que representaban estos personajes femeninos se les ponía este acrónimo para que el vestuarista entienda que esa persona iba vestida de mujer”, explica la entrevistada.

Entre las confusiones que conlleva el mundo drag, la vinculación de este tipo de arte con la homosexualidad es directa, pero como la mayor parte los prejuicios suceden desde la ignorancia, es importante aclarar esta cuestión. “El ser drag no tiene nada que ver con tu expresión sexual o de género, eso va por un lado y por otro lado va el arte que vos hacés.  Hoy por hoy tenemos mujeres que hacen drag, chicas trans o chicos trans que hacen drag y también tenemos hombres cisgénero que hacen drag. Es muy variado y es independiente una cosa de la otra”, sostiene nuestra entrevistada.

Aún así, esa palabra mutó con el tiempo. “Hoy ser drag significa muchas otras cosas. Son ramas de expresión artística que pueden estar ligadas a la danza, a la música, a la expresión del maquillaje, al teatro, a la pintura, a la performance. Entonces para cada persona que decide montarse significa cosas diferentes. Para mí significa ser una performance de la moda o del maquillaje, depende. Me divierto mucho con esto”, indica.  

“La gran madre RuPaul, que es quien originó la masividad de todo esto, dijo una vez ´todos nacemos desnudos y el resto es drag´. Para mí montarme es un montón de cosas, no solamente cuando me maquillo y cuando hago una performance sino que nace con la búsqueda de la expresión artística”, relata Miuka.

En la última década, la cultura drag ganó una gran popularidad en nuestro país y en el mundo. El programa de televisión "Rupaul's Drag Race" contribuyó a su difusión y no sólo se popularizó sino que arrasó con muchos de los prejuicios que pesan sobre esta disciplina. “No todos los backgrounds son los mismos, es una realidad, hay mucha gente que vive esto como un peso. Yo soy el ejemplo de que el apoyo familiar desde una temprana edad fomenta cosas muy positivas y muy copadas. Hay mucha gente que no tuvo esa misma posibilidad pero encontró refugio siempre en alguien más grande o en la propia comunidad”, sostiene.

La familia no biológica es un pilar importantísimo para una crianza amorosa para las personas trans y eso está presente en muchísimas de estas historias. "Eso también lo dijo RuPaul ´The family, that life, trucks together´. La familia que se crea cuando vos te volvés grande y cuando vos te estás haciendo drag siempre se queda junta, porque esas enseñanzas, no te las olvidas más. Yo no me olvido ni de las enseñanzas de mis padres, pero tampoco de mis primeras madres artísticas", sostiene Miuka. 

La marcha del orgullo año a año se vuelve más multitudinaria y ese es un claro mensaje de resistencia. "La primera vez que fui fue hace diez años, ahí conocí a un montón de amigos que los conservo hasta el día de hoy. Era todo llamativo y nuevo. La realidad es que no había ni el 10% de la cantidad de gente que hay hoy". sostiene. 

Y si bien en nuestro país se realiza en noviembre y sucede como una gran fiesta masiva, para la entrevistada no se debe correr el foco. "Lo más importante es que más y más personas, marcas, gente de todo tipo, decidan ir y acompañar. Apostar a la marcha para que sea un día de liberación para un montón de colectivos y que sea de disfrute y de goce. Pero sin olvidar todo lo que todavía nos falta. Hay que aprovechar esa oportunidad que tenemos al año para denunciar las atrocidades y festejar nuestra existencia", finaliza.