Flow puntaltense y música audiovisual: conocé a Blair, la artista de 18 años que va por todo
Su single debut 'Al Final del Día' ya superó las 270.000 reproducciones en YouTube y en Instagram afloran las fanpages con su rostro y frases. Quién es y qué se trae entre manos.
Después de 18 años de curtir las calles de Punta Alta (ubicada a 28 kilómetros de Bahía Blanca), Julieta Aylén Ordorica se prepara para abandonar la ciudad que la vio crecer y así perseguir sus sueños como artista. Su A.K.A es Blair y, sin exagerar, es una de las revelaciones de la escena urbana argentina: su single debut, 'Al final del día', superó las 270.000 reproducciones en YouTube y las 80.000 en Spotify. En Instagram se multiplican las cuentas que la stanean fuerte. Quién es y qué podemos esperarnos de ella, te lo contamos en esta nota.
"Perdón mamá, decidí que mi prioridad es la música", le dice a Filo.News, reproduciendo la conversación en que comunicó que, tras haber finalizado la secundaria en 2019, no iba a seguir una carrera universitaria sino artística y libre de programas curriculares. "Si empezaba una carrera lo iba a hacer sin ganas o me hubiera preguntado 'Qué hubiese pasado si...'. En dos semanas me mudo a Capital Federal y literalmente voy con las manos vacías: voy a estar parando en lo de una amiga y estoy tirándome a la pileta, así que espero poder flotar".
En su catálogo -inaugurado apenas 5 meses atrás- figuran las canciones 'Sharingan', '#bless' (junto a Big TI) y 'Empezar de Cero', sencillo que lanzó en YouTube la semana pasada y que mañana, viernes 21, finalmente llega a Spotify.
"Yo al principio quería hacer rock alternativo", se sincera Julieta. "Pero después descubrí que una banda no era lo mío y empecé a interesarme por otro tipo de música. Desde chica me llamó la atención el rap, aunque en ese momento no sabía que era un movimiento: escuchaba pop y había partes en las que rapeaban. Ésas eran mis favoritas".
Tampoco fue la música per se el primer arte que exploró: "Lo que hice desde chica fue ir a clases de teatro. Actualmente no lo hago porque descubrí que me gusta más la actuación frente a cámara y no tanto sobre el escenario, pero fui a comedia musical durante un par de años: teníamos clases de baile, actuación y canto, y aprendí técnicas de respiración, entre un montón de otras cosas".
La disciplina que definió su participación en la música, sin embargo, fue la escritura: "Arranqué a hacer música porque toda mi vida escribí; primero textos, después poesía. Ahí me di cuenta que la poesía estructuralmente se parecía mucho al formato de una canción y dije '¿Por qué no pasarlo a música?'". Así surgió 'Al Final del Día'.
"Ese tema lo hice sin querer: había ido a un estudio a grabar otra cosa y tenía tiempo de sobra así que dije 'Bueno, vamos a probar esto' sobre un beat que me había pasado mi amigo (Matías) Bullz. Eran tomas para hacer una maqueta, ni siquiera iban a quedar. Se las mandé y al otro día yo no podía creer lo que escuchaba, era fantástico", cuenta, haciendo referencia al trabajo que el productor había hecho con el material.
De inmediato se dio cuenta de que su canción necesitaba un videoclip. "El video es el 50% del tema", dice Blair, y cita a la canadiense Grimes como uno de sus modelos a seguir: "Ella dice que su música es audiovisual (música+video) y yo pienso exactamente igual". Lo que esperaba que tuviese "con el tiempo" 50.000 views, terminó quintuplicando ese valor y contando. "En menos de 24 horas me habló gente con la que nunca pensé que iba a tener contacto", se asombra.
Pero lo cierto es que su último sencillo vaticina un éxito similar y fue compartido y celebrado por colegas de la escena. Aunque no fueron lxs únicxs que lo disfrutaron: "Hubo gente que me agradeció por este tema. El mensaje es de reflexión; sobre todo por el texto del principio que es como 'Che mirá, está todo destruido, sentís que está todo en pedazos, pero esos pedazos te pueden servir para armar algo nuevo, para empezar de cero'. Y la gente captó ese mensaje".
Sus letras parecen calar hondo en las mentes de muchxs de sus seguidorxs, que crean perfiles en su honor en Instagram: "Ves gente que te conoce desde que sos chica y no te da importancia, y al otro lado de la pantalla y del mundo hay gente que se preocupa por vos como si fueses su hija. Ese amor incondicional es re loco. Que me den ese apoyo y que gasten 5 minutos de su día en mandarme un mensaje, en hacer una foto con frases, me re alegra el día".
Además de fanpages, Internet también le obsequió su nombre artístico: "No voy a mentir, estaba navegando, lo vi y dije 'Fa, qué lindo nombre'. Me gustó tanto que me puse a investigar. Yo quería algo relacionado a las brujas; desde hace años me dicen 'Juli, la bruja' porque siempre fui del palo de lo espiritual. Buscando descubrí 'La bruja de Blair', y que Blair no es el nombre de ella sino del pueblo. Me re llamó la atención porque soy de Punta Alta, una ciudad tan chica que a veces se refieren a ella como pueblo y es lo que hoy en día me limita en parte para avanzar en mi carrera. Me gustó", reflexiona, y agrega entre risas: "Después también descubrí que hay un animé que se llama Soul Eater, en el que hay un personsaje que es bruja y se llama Blair".
Mudarse a Capital Federal, encarar su carrera de una forma más decidida y brindar shows es lo que se viene en 2020 para Julieta: hasta el momento, hay dos fechas en tratativas a partir de la segunda quincena de marzo, aparte de un feat con Helena (Odd Mami), entre otras collabos pendientes.
En cuanto a metas, la entrevistada revela que establece una serie de objetivos "fáciles entre comillas" para que se arme una escalera hacia los más grossos: "El primero era llegarle al público y hacer contacto con gente que re respeto de la movida. Apenas saqué mi primer tema ya pasó y son dos metas que tengo y voy a seguir teniendo", señala, y enumera algunos sueños que le gustaría cumplir: "Hacer colaboraciones con esas personas; una Bizarrap Session; tocar en festivales; trabajar con productores grossos; viajar".
Más allá de los anhelos que la movilizan, Blair se detiene un momento a explicar por qué hace lo que hace: "Siempre hago las cosas por y para mis seres queridos, siempre pienso en plural. Cuando logre mis metas quiero estar rodeada de ellos".