El partido de ida en la cancha de Vélez no fue fácil para Mauro Zárate que recibió insultos, chiflidos y canciones donde lo acusaban de ser un traidor. En lugar de calmar las aguas con los hinchas del equipo que lo vio nacer futbolísticamente y le abrió las puertas en varias oportunidades, el delantero amplió la grieta.
La relación entre los hinchas del "fortín" y Zárate no es buena desde que se fue del club para jugar en Boca. Agresiones, amenazas hacia su familia y pintadas. Tras convertir su penal, el tercero en la tanda para Boca, Zárate lo festejó de forma desmedida con gritos y golpeándose el pecho, mostrando el escudo. Pero eso no fue todo.
Al terminar el partido, en diálogo con Fox Sports, las declaraciones golpearon fuerte en el mundo Vélez: "Tuvimos un partido difícil allá, pero acá lo pudimos manejar bien. Tuvimos las ocasiones para hacer los goles y no los hicimos. Después nos tocó sufrir".
Sobre su penal y su festejo desmedido, respondió: "Lo importante es que pasamos y ahora vamos por la semifinal y a tratar de pasar y ganar esta copa que es, entre comillas, una obligación para nosotros". Respecto a su opinión sobre definir una seria por penales, opinó: "Es lindo pasar por penales porque es un poco a lo Boca. Hicimos lo posible, pero nos cansamos. Pasamos y eso es lo importante".
Pero hubo una frase que quedará en la memoria de los hinchas Vélez que le tenían cariño y si alguno todavía sentía algo positivo por él, ya no más. "¿Pasó el que correspondía pasar?", preguntó Marcelo Benedetto, a lo que Zárate respondió: "Si, yo creo que si. Pasó el equipo grande".