Los jugadores de Brasil preparan un manifiesto para dejar sentada públicamente su posición sobre la realización de la Copa América en el país, que atraviesa una grave crisis sanitaria por el COVID-19.

El plantel encabezado por Tite buscará alejarse de las divisiones políticas generadas por su postura contra el campeonato continental en el país, lo que se leyó como un desafío a la autoridad del presidente Jair Bolsonaro.

Antes de definir su postura, tuvo dos reuniones con el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Rogério Caboclo, que no resultaron como esperaban. 

La primera de ellas fue el domingo en el que se informó que Argentina no iba a organizar el torneo, un día antes de que la Conmebol anunciara a Brasil como el hospedante. A los jugadores de la Verdeamerela les molestó que Caboclo no mencionó la posibildad.

El otro encuentro fue el último miércoles, antes de jugar con Ecuador por las Eliminatorias, cuando el titular de la CBF se mostró con un tono más agresivo y buscó subordinarlos a la posición del organismo.

La fecha clave para conocer la posición del plantel campeón de la última Copa América y su DT Tite es el próximo martes, cuando termine el partido con Paraguay en Asunción. Los rumores indican que Tite podría hasta renunciar. 

"Todo el mundo sabe cuál es nuestra posición, todo el mundo la sabe, más clara imposible y Tité ya la expuso públicamente", dijo Casemiro tras el partido con Ecuador.

Brasil inaugurará el torneo organizado por la Conmebol el próximo 13 de junio cuando se enfrente a Venezuela en el estadio Mané Garrincha de Brasilia.