La horrible noche de la Selección Argentina, que igualó 0 a 0 frente a Perú en La Bombonera, tuvo varias situaciones tristes más allá del resultado.
El volante de Boca, Fernando Gago, que ingresó a los 15 minutos de la segunda etapa por Éver Banega, sufrió una gravísima lesión instantes después de haber entrado y debió salir tras pronunciar una fatídica frase: "Me rompí los cruzados", refiriéndose a los ligamentos de la rodilla.
El mediocampista recibió la pelota, dio un pase y realizó un mal movimiento ante la marca de un rival. Inmediatamente, Gago se tiró al suelo e hizo la inconfundible señal para pedir el cambio.
A pesar de que intentó seguir en la cancha, apenas podía caminar y se fue al vestuario con mucha bronca y tristeza. Las cámaras captaron el momento en el que el futbolista Xeneize aclaró qué lesión creía haber sufrido.
Lamentablemente, el mediocentro argentino vuelve a padecer de un problema físico tras las durísimas lesiones en el tendón de Aquiles, que lo marginaron de las canchas por varios meses.
De esta forma, el jugador albiceleste deberá ser evaluado por los médicos para determinar el grado de la lesión. ¡Fuerza, Fernando!