Ir al contenido
Logo
Ciencia #abuelas de plaza de mayo

Día Nacional del Derecho a la Identidad: ¿cómo intervino la ciencia?

En esta nota te contamos cómo la ciencia se involucró en la búsqueda de los niños robados por la dictadura argentina.

Día Nacional del Derecho a la Identidad: ¿cómo intervino la ciencia?

En 2004, la Ley 26.001 sancionada por el Congreso Nacional establecía el 22 de octubre como el Día Nacional del Derecho a la Identidad para conmemorar la lucha emprendida por Abuelas de Plaza de Mayo

Esta fecha coincide con el cumpleaños de Estela de Carlotto —quien hace cinco años encontró a su nieto y recuperó un pedacito de identidad— y con la fundación de la Asociación Civil Abuelas de Plaza de Mayo, creada con el objetivo de localizar y restituir a sus legítimas familias todos los niños desaparecidos por la última dictadura argentina, que este 2019 cumple 42 años de búsqueda.

A continuación te contamos cuál fue el aporte de la ciencia al derecho a la identidad; desde las técnicas más avanzadas de identificación genética que permitieron la búsqueda e identificación de hijos e hijas de personas desaparecidas, hasta las ciencias forenses cuyo objetivo principal era establecer la identidad, la causa y el modo de muerte de las víctimas.

Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF)

Esta organización científica, no gubernamental y sin fines de lucro trabaja en la búsqueda e identificación de los restos de personas detenidas-desaparecidas durante el Terrorismo de Estado que tuvo lugar en nuestro país entre 1974 y 1983.

Fue creada en 1984 con la asistencia del entonces director del Programa de Ciencia y Derechos Humanos de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, Eric Stover, quien reunió expertos forenses norteamericanos y organizó una delegación. Con ellos viajaría a Argentina luego de que se encontraran "cientos de esqueletos exhumados sin identificar almacenados en bolsas plásticas, muchas de las cuales contenían huesos de más de un individuo", según relatan en la web del EAAF .

"Por primera vez en la historia de la investigación de violaciones a los derechos humanos empezamos a usar metodología científica para investigar estos crímenes. Aunque empezamos de a poco, produjo una verdadera revolución en el modo en que se investigan las violaciones a los derechos humanos. La idea de usar la ciencia en el área de derechos humanos comenzó aquí en la Argentina y ahora se usa en todo el mundo. El equipo llevó la idea a todos lados y ayudó a la formación de equipos en países como Guatemala, Chile, Perú. Los países europeos tienen ahora sus equipos de antropología forense. Pero los argentinos fueron los pioneros", cuenta el Dr. Clyde Snow —miembro de esa delegación— en una entrevista.

A lo largo de su historia, el EAAF recuperó más de 1.400 cuerpos y lleva identificados a 795 desaparecidos aplicacando ciencias forenses.

Banco Nacional de Datos Genéticos

“Nosotras, con esa ilusión de recuperar el nieto, mirábamos las caritas de los bebés pensando que íbamos a encontrar los ojos del hijo o de la hija, el color de pelo. Una ilusión absurda, pero no nos dábamos cuenta. A veces seguíamos a una pareja que llevaba a un bebé que se parecía al hijo nuestro, o a la hija. Pero la mamá era igual al niño”, contó Carlotto acerca los inicios de su búsqueda.

Aunque en ese momento se disponía del análisis de sangre para determinar la paternidad, de poco servía cuando los padres estaban desaparecidos y presuntamente muertos; se necesitaba de otro método que pudiera ligar un nieto con una abuela. Fue entonces cuando se creó el "índice de abuelidad", una fórmula que a partir de material genético (sangre de la familia materna) establece la posibilidad de parentesco entre un nieto y sus abuelos.

Fue gracias a la genetista Mary Claire King y la colaboración de un grupo de científicos que en 1980 se logró desarrollar ese índice a pedido de la organización Abuelas de Plaza de Mayo, cuyos resultados son lo suficientemente precisos como para confirmar o descartar un vínculo genético, ya sean de paternidad, abuelidad, etc.

Fue así que nació en 1987 el Banco Nacional de Datos Genéticos de familiares de niños desaparecidos, una institución autónoma y autárquica —actualmente depende de la Secretaría de Gobierno de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva— con el propósito de "crear un banco como espacio de obtención, almacenamiento y análisis de las muestras genéticas necesarias para el esclarecimiento de delitos de lesa humanidad en Argentina, que garantizara así la conservación de los perfiles genéticos de cada uno de los miembros de las familias que sufrieron el secuestro y desaparición de algún integrante".

Hasta el día de hoy, se identificaron más de 120 nietos.

La genetista Mary Claire King explica a las Abuelas Estela de Carlotto y Nélida Navajas cómo se determina el “índice de abuelidad”.

Si tenés dudas sobre tu identidad, en este link podés encontrar información sobre qué podés hacer

Ultimas Noticias