Diez presos se fugaron por la madrugada de la seccional 5° que se ubica en el centro de la ciudad santafesina de Rosario. Los detenidos limaron los barrotes de su celda y quitaron el alambrado que se encontraba en la terraza del edificio. Se dieron cuenta de la huida en el recuento de reclusos.
Por este hecho se realizó una inspección de la comisaría y se tomó declaración a los internos y al personal. De acuerdo a los primeros datos, se supo que la comisaría tenía capacidad para 20 internos y tenía más del doble cuando se produjo la fuga.
El escape podría estar relacionado con el desplazamiento del comisario Luciano Quintana, que estaba al frente de la seccional 5° e iba a ser pasado a disponibilidad por presuntas irregularidades en el manejo de la seccional.
El caso está en manos de la fiscal de la Oficina de Violencia y Corrupción policial, Karina Bartocci, con la asistencia de la Dirección de Asuntos Internos y la Policía de Investigaciones.