El fiscal Miguel Moreno solicitó la pena de prisión perpetua para una madre y una hija, imputadas por el crimen de un ejecutivo asesinado de 64 puñaladas, en Rosario. La menor de las mujeres mantenía una relación una relación con la víctima y se sospecha que expuso como móvil principal la existencia de una "deuda impagable".
Moreno acusó a Virginia Seguer (40) y a su madre Alicia Fernández (60), por el homicidio de Diego Sarjanovic, gerente de la firma Mc Catering, ocurrido en septiembre de 2015. Sin embargo, los abogados, Jorge García Cupé y Nelson Flores, defensores de las incriminadas, sostuvieron que la mujer se defendió de una agresión del fallecido.
Según trascendió, el fiscal sostiene que el hecho se desencadenó debido a un préstamo que el gerente le había realizado a su ex mujer, con dinero de la empresa para la que trabajaba, para un negocio que resultó inviable desde el punto de vista económico.
Durante el juicio, se dio a conocer a través de testigos que Seguer había convencido a Sarjanovic de prestarle unos 100.000 dólares para negocios como la compra de un container con productos provenientes de China o de ropa de la feria La Salada.
El tribunal encargado del juicio está conformado por los jueces Gustavo Pérez de Urrechu, Patricia Bilotta y Delia Paleari.
El crimen
El cuerpo de Sarjanovic fue hallado con signos que evidenciaban las 64 puñaladas que le provocaron la muerte el 7 de septiembre de 2015. La escena del crimen sucedió en un los departamento del edificio situado en Moreno al 500, Rosario.
Se detuvo a Seguer y Fernández en la provincia de Córdoba cuando escapaban en un autohacia Mendoza. En la argumentación del fiscal había quedado indefinida la forma en la que las mujeres logrado reducir a un estado de "indefensión" a un hombre con una contextura física mayor.
Las sospechas apuntan a que Seguer había citado a Sarjanovic al departamento tres días antes del hallazgo del cuerpo, una fecha límite para saldar la deuda, y que lo mató, con la complicidad de su madre.