Rodrigo de Loredo, expresidente de la empresa de telecomunicaciones Arsat, reconoció que la medida contra el nepotismo tomada por el Gobierno es fuerte, pero "necesaria" por la situación que estamos viviendo en el país.
"Me parece una muy buena decisión. Necesaria, dura, fuerte, pero necesaria en el contexto en que vivimos. No soluciona de raíz la multiplicidad de problemas asociados al empleo público, pero se inscribe en los gestos de ejemplaridad que los funcionarios públicos debemos dar", sostuvo el yerno del ministro de Defensa, Oscar Aguad, respecto al decreto antinepotismo.
"Y un 31 de enero de 2018 vino Lucía. Hermosa y fuerte. Luminosa y cargada de energía. Gestada en mis tiempos de galaxias y satélites. Tiempos que también hoy se terminan", escribió el expresidente de Arsat en Facebook anunciando la llegada de su cuarta hija con Carolina Aguad y, a su vez, su renuncia al cargo de la empresa estatal.
En diálogo con Radio La Red, señaló que le presentó la renuncia al ministro de Modernización, Andrés Ibarra, y se hará "efectiva el 28 de febrero".
En relación al decreto, el cordobés admitió que "habrá excepciones, habrá justos que paguen por pecadores" y reconoció: "Si soy franco, cada vez que hay designaciones de familiares son más los acomodos que las excepciones. No estoy descubriendo la pólvora con esto que digo".
El dirigente radical reconoció que "no tenía ningún tipo de experiencia en materia de ingeniería en telecomunicaciones o vinculada a una empresa de telecomunicaciones. Por eso sabía de la necesidad de armar un equipo de excelencia".
Sus años al mando de la empresa estatal le dejan un resultado positivo: "Estoy muy satisfecho con el equipo que logramos construir, porque Arsat es una empresa en competencia con otras empresas y era una que perdía recursos y recibía aportes del Tesoro: ahora gana plata y no recibe aportes del Tesoro", agregó.