La ingesta de dióxido de cloro fue la causa de muerte del niño de 5 años de la localidad neuquina de Plottier, cuyo deceso se produjo el 15 de agosto.
Así lo informó hoy la fiscalía de Homicidios que investiga la verdadera causa de su fallecimiento y convocó a una junta médica integrada por médicos y médicas del Cuerpo Médico Forense del Poder Judicial y del sistema de Salud pública de la provincia de Neuquén para establecer con mayor precisión si el niño falleció de acuerdo a una hipótesis de la investigación como consecuencia de la ingesta de dióxido de cloro que le fue suministrado por el padre y la madre.
Por pedido de la fiscal del caso Sandra Ruixo, la junta médica analizó los resultados de la autopsia y estudios bioquímicos, y respondió tres aspectos que consultó la representante del Ministerio Público Fiscal: 1) Causa del fallo multiorgánico revelado por la autopsia; 2) En caso de haber sido originado por una intoxicación, cuál fue la sustancia que lo produjo; 3) Si esa sustancia es compatible con dióxido de cloro.
Sobre el primer punto, la junta médica sostuvo que “una etiología tóxica sería compatible con el cuadro descripto”; respecto al segundo, “puede inferirse la ingesta de una sustancia química cáustica”; y sobre el tercero que “los hallazgos descriptos son compatibles con la ingesta de dicho producto”, en referencia al dióxido de cloro.
A instancias del contenido del informe, la fiscal del caso analiza si realizará imputaciones y eventualmente por qué delito y a quién o quiénes comprenderá.
En principio esta hipótesis, está sustentada en la información que aportó un médico del hospital de Plottier, quien atendió al niño en la madrugada del 15 de agosto luego de que fuera trasladado por sus familiares directos, y quien dialogó con ellos. El profesional afirmó que los familiares dijeron que le habían dado en forma previa y a modo preventivo por el COVID-19, dióxido de cloro.
En el informe, los profesionales indicaron que “faltan realizarse estudios anatomopatológicos y toxicológicos”.
La autopsia reveló que el niño falleció como consecuencia de un fallo multiorgánico. Para determinar qué lo provocó, desde el Ministerio Público Fiscal se encargaron estudios complementarios, que fueron evaluados por la junta médica.
El caso ha sido investigado hasta el momento como muerte dudosa. Entre las medidas ordenadas por la fiscal del caso, figuraron el allanamiento de una vivienda en la localidad Plottier, en la cual el niño vivía con su familia; pedidos de informes médicos; y entrevistas a profesionales de la salud, familiares del niño y efectivos de la Policía de Neuquén.