Desde el inicio del caso Pereg, existe una compulsa entre la fiscalía y la defensa alrededor de la supuesta locura del acusado. Y esta semana los abogados del israelí se anotaron un poroto: jueces de segunda instancia permitieron que se incorporen a la causa declaraciones de psicólogos y psiquiatras que reforzarían la tesis de la insanía mental. 
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 Pereg, presente en la sala, no dejaba de maullar 
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El juez Sebastián Sarmiento y la fiscal de Homicidios Claudia Ríos Ortiz sostienen que esas pruebas no deberían sumarse al expediente. Sin embargo, los magistrados Rafael Escot, Luis Correa Llano y Eduardo Martearena hicieron lugar al pedido de la defensa durante la audiencia del pasado martes. 
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Entre tanto, Nicolás Gil Pereg, que estaba presente en la sala, no dejaba de maullar. Luego de esta&nbsp;decisión judicial, deberán sumarse declaraciones de 6 psiquiatras y 2 psicólogos del Cuerpo Médico Forense, más un psicólogo del Servicio Penitenciario y 6 personas que conocían al acusado antes de los asesinatos. También podrían añadirse documentos provenientes de Israel, donde el acusado tuvo inconvenientes a causa de su raro comportamiento. 
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Una vez que se incorporen estos elementos, la fiscalía pedirá la elevación a juicio oral y público. Claro que, si la defensa logra que Pereg sea declarado inimputable, habrá conseguido lo que parecía imposible a principios de año: que el supuesto asesino sea trasladado a un Neuropsiquiátrico en lugar de pasar el resto de su vida en un penal. 
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 El juicio por jurados podría ser complicado para Pereg 
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Si se llega al juicio por jurado, en cambio, la situación podría complicarse para Pereg. De arribar a esa instancia, un tribunal&nbsp;popular de doce personas definirá si es culpable. Pero este tipo de jurados tiende&nbsp;a ser especialmente "duro", máxime cuando se trata del asesinato de familiares cercanos. 
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<h4>Enero sangriento</h4> 
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Pyrhia Saroussy&nbsp;(63) y Lily Pereg&nbsp;(54) vinieron a Mendoza el 11 de enero de este año para visitar a Nicolás Gil Pereg. Al otro día se reunieron con él, pero luego desaparecieron misteriosamente. Después de varios días de pesquisa, sus cadáveres se encontraron enterrados en el predio de Guaymallén donde vivía el hombre. 
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Pereg quedó detenido, pero -a pesar de que en jornadas previas había charlado con la prensa "normalmente"- pronto empezó a maullar y a actuar como un gato. Para muchos, es una simulación que busca salvarlo de seguir preso. Para otros, son los síntomas de un enfermo mental en franco deterioro. 
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Los abogados dicen que Pereg no está siendo tratado como corresponde.

Nicol&aacute;s Gil Pereg (38) est&aacute; acusado de haber matado a su madre y su t&iacute;a en enero. Ahora sus abogados consiguieron que la justicia&nbsp;considere la opini&oacute;n de&nbsp;psic&oacute;logos y psiquiatras.

Nicol&aacute;s Gil Pereg (38) est&aacute; acusado de haber matado a su madre y su t&iacute;a en enero. Ahora sus abogados consiguieron que la justicia&nbsp;considere la opini&oacute;n de&nbsp;psic&oacute;logos y psiquiatras.

La defensa de Pereg insiste con la estrategia de la locura

Judiciales

El Ministerio de Justicia de la Nación recomendó trasladar a un pabellón psiquiátrico a Nicolás Gil Pereg para que el detenido pueda recibir un “tratamiento adecuado”. &nbsp; 
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 "El interno no recibe las condiciones sanitarias necesarias", dice el estudio. 
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El peritaje fue realizado por expertos del Programa Nacional de Asistencia para las Personas con Discapacidad en sus Relaciones con la Administración de Justicia (Adajus), que depende del mencionado&nbsp;ministerio. Lleva la firma de&nbsp;la coordinadora del programa, Mabel Aurora Remón: "el interno no estaría recibiendo (...) las condiciones sanitarias necesarias de acuerdo a su procedimiento", detalla el texto. 
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El israelí&nbsp;-acusado de haber matado a su madre y a su tía-&nbsp;sufre un deterioro sostenido desde que fue privado de la libertad. A la falta de higiene se le añade un agravamiento de su estado mental y hasta una lesión en la mano que, según sus&nbsp;abogados, no fue tratada adecuadamente.&nbsp; 
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El equipo de Adajus entrevistó a Pereg el 19 de septiembre. Se encontraron con él la licenciada Liliana Russo (psicóloga); la abogada Patricia Cáceres y el funcionario Eduardo Soto.&nbsp; Y las conclusiones del informe son explícitas. 
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"Se aconseja el traslado del señor Gil Pereg a un hospital penitenciario para pacientes psiquiátricos que le permita recibir el adecuado cumplimiento en base a los tratamientos aconsejados.&nbsp;Dicho establecimiento deberá contar con: psiquiatra, psicólogo y enfermero especializado en pacientes mentales en forma permanente", solicitaron. 
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 <img alt="Pereg" data-height="400" data-size="w:945,h:473" data-width="800" hspace="5" src="https://assets.dev-filo.dift.io/img/2019/10/17/pereg_4.jpg_818140183.jpg" title="Pereg" vspace="5"> 
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 Deteriorado: Nicolás Gil Pereg en su celda. 
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El documento se incorporó al expediente y habrá que ver qué deciden los jueces. De acceder, seguramente será un golpe para la postura de la fiscalía. 
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<h4>¿Enfermo, asesino, o ambas cosas?</h4> 
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Nicolás Gil Pereg está acusado de asesinar a su madre Pyrhia Sarusi (63) y su tía Lily Pereg (54) el 12 de enero de este año. Luego de las primeras pesquisas, los investigadores hallaron los cuerpos de las mujeres en el fondo del predio en el que vivía el israelí. 
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 <img alt="Pereg 2" data-height="450" data-size="w:800,h:450" data-width="800" hspace="5" src="https://assets.dev-filo.dift.io/img/2019/10/17/gil_pereg_2.jpg_674994428.jpg" title="Pereg 2" vspace="5"> 
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 El acusado a metros del sitio donde se hallaron los cadáveres. 
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Entonces Pereg quedó preso. Según la defensa, fue el principio de un calvario. Desde el principio de su detención se dijo que otros internos lo atacaban, y se denunció que los penitenciarios lo bañaban a la fuerza. En el último de esos incidentes, Pereg se lastimó una mano&nbsp;-supuestamente-&nbsp;mientras lo estaban lavando. 
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 "Soy un gato, aunque mi apariencia sea humana", repite Gil Pereg. 
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Esta semana, el abogado&nbsp;Maximiliano Legrand declaró que los otros presos le quitaron a Pereg el colchón y le arrojan papeles con fuego dentro de la celda, lo que agravaría la situación del israelí, quien –según él mismo cuenta- padece frecuentes alucinaciones. 
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Vale destacar que el acusado&nbsp;repite que “es un gato” y tiene una elaborada narración para sostener ese delirio. Se debate si su locura es real. Y si finalmente se inicia el juicio, el tribunal enfrentará la difícil decisión de evaluar su condena.

El israel&iacute; acusado de haber matado a su madre y su t&iacute;a en Guaymall&eacute;n empeora cada d&iacute;a. Tiene una mano lastimada y hay tensi&oacute;n con otros detenidos.

El israel&iacute; acusado de haber matado a su madre y su t&iacute;a en Guaymall&eacute;n empeora cada d&iacute;a. Tiene una mano lastimada y hay tensi&oacute;n con otros detenidos.

Gil Pereg: el Ministerio de Justicia recomienda internarlo en un psiquiátrico

Policiales

Gilad Gil Pereg&nbsp;(38) está&nbsp;detenido por la muerte de su madre Pyrhia Saroussy (63), a quien estranguló y&nbsp;de su tía, Lily Pereg, (54)&nbsp;a quien ultimó de tres tiros, habló&nbsp;con el portal&nbsp;Infobae. 
El abogado Maximiliano Legrand, anticipó que el hombre&nbsp;se quiere quitar la vida.&nbsp;"Está muy mal y está en evaluación un traslado a un psiquiátrico". Fue él mismo quien&nbsp;se definió como un "gato" ante el juez. Sus palabras fueron incorporadas al expediente:&nbsp;"Mire señor juez, usted me ve como un hombre, pero soy un gato". 
Sobre el mismo tema, o el propio Pereg dijo en su momento al magistrado: "Pensará que estoy loco, esa es su opinión.&nbsp;Yo soy un gato, vivía con 37 gatos. Eso quiere decir que mis 37 hijos quedaron abandonados en mi casa.&nbsp;No me juzgue como hombre". 
Durante las dos semanas de búsqueda de las víctimas, Pereg hizo la denuncia en la policía por las desapariciones y hasta les pidió&nbsp;a los periodistas que lo acompañaran a la villa situada a la vuelta de su casa. “Ahí viven los ladrones que las secuestraron”, dijo mientras señalaba una vivienda. 
“Acá hay mucha inseguridad, se las llevaron.&nbsp;Tal vez fueron espías del Mossad o los ladrones del barrio, me quiero ir de este lugar. Pongo en venta mi casa, los interesados saben cómo contactarme”, dijo ante cámara. 
En las entrevista del citado diario&nbsp;le hacen una&nbsp;pregunta directa: 
-¿Usted mató a su madre y a su tía? 
-¡Cómo va a decir eso! ¡Mi madre está desaparecida! 
Gil Pereg&nbsp;resaltó en varios tramos de la charla que no quiere&nbsp;vivir sin&nbsp;sus gatos. 
"Son mis hijos. Sé los nombres de todos. Al que más quise se llamaba Bombadil. Me quiero matar, pero al mismo tiempo quiero estar vivo porque quiero mantener el sufrimiento que me aqueja para mantenerme con vida. Por más que quiera evitarlo, mi mano va a querer matarme, quiera o no quiera.&nbsp;¿Sabían que yo tenía relaciones con mi madre? Buscaba crear una raza híbrida: quería concebir hijos y criarlos como gatos. Y que mi madre fuera madre de esos gatitos y a la vez abuela. Pero ella no funcionaba para tener hijos.&nbsp;También tuve relacione sexuales con las gatas. Nos turnábamos con Badjus. No sé si algún hijito gatito es mío. Los de Badjus eran grises y chiquititos, pero nacían muertos porque Badjus es único".

Sombrío: Pereg está aislado, pero aun así tiene problemas.

El israel&iacute;, que contin&uacute;a detenido por el doble femicidio de su madre y su t&iacute;a, dijo que quiere morir si no puede vivir con sus gatos.

El israel&iacute;, que contin&uacute;a detenido por el doble femicidio de su madre y su t&iacute;a, dijo que quiere morir si no puede vivir con sus gatos.

Gil Pereg: "Quería sentir el olor de la muerte"

La defensa de Nicolás Gil Pereg denunció que el personal de la cárcel le quebró una mano al detenido. Por eso pidieron que lo atiendan especialistas y reiteraron que el israelí&nbsp;padece vejaciones y no está siendo tratado adecuadamente. 
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 "Tiene un yeso pero esa no es la atención adecuada" (Maximiliano Legrand, abogado defensor) 
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El incidente se habría producido cuando los guardias quisieron bañar a Pereg: la falta de higiene del gigante&nbsp;genera problemas, y la institución no sabe cómo resolver ese inconveniente. En un momento, el detenido recibió un golpe. Como estaba esposado, alguna torsión hizo “palanca” en su mano y el hombre se lastimó un hueso. 
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Maximiliano Legrand lidera la estrategia legal para defender al&nbsp;hombre que dice ser un gato: 
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“Personal penitenciario lo golpeó y le quebró una mano –acusó el letrado-. No sabemos si lo ha visto un traumatólogo. Por eso hemos presentado un habeas corpus: Pereg tiene un yeso en la mano pero esa no es la atención adecuada. Lo tiene que ver un especialista”. 
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Según la versión de la defensa, a Pereg le pusieron el yeso a dos días de haberlo&nbsp;herido. Legrand: “él sigue solo, porque no puede estar con otras personas a causa de su condición de enfermo mental. Sin embargo se deben terminar estas vejaciones”.

As&iacute; lo denunci&oacute; la defensa del israel&iacute;, a quien se acusa de&nbsp;haber matado&nbsp;a su madre y a su t&iacute;a el pasado 12 de enero.

As&iacute; lo denunci&oacute; la defensa del israel&iacute;, a quien se acusa de&nbsp;haber matado&nbsp;a su madre y a su t&iacute;a el pasado 12 de enero.

Personal penitenciario le habría quebrado una mano a Gil Pereg

El hombre que asegura ser un gato se encuentra desde hace meses en el penal San Felipe. Gil Pereg está acusado por la muerte de su madre Pyrhia Saroussy y su tía Lily Pereg. Ambas fueron encontradas enterradas en el baldío donde él vivía.&nbsp; 
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Desde el comienzo de la causa, los abogados defensores -Maximiliano Legrand, Lautaro Brachetta y Marcos Segovia- solicitaron una pericia que demuestre el estado real del imputado. Vale aclarar que ni bien se lo detuvo, la fiscal de la causa, Claudia Ríos, solicitó una pericia y la misma dio cuenta de que el hombre estaba orientado, pero podía presentar brotes psicóticos durante el encierro. En este estudio, no hubo peritos aportados por la defensa, por lo que ahora solicitan que se repita, pero con médicos de ambas partes.&nbsp; 
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Este fue el planteo que se hizo en la audiencia de este jueves. Ahora deberá definir el juez de la causa, Sebastián Sarmiento, pero el magistrado decidió llamar a un cuarto intermedio, por lo que la resolución se conocerá en unos días.&nbsp; 
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Además, los letrados que defienden a Pereg pidieron que se incluyan nuevos testigos y que se les tome declaración. Estos darían cuenta de los gritos que se escuchaban durante las noches y que provenían de la casa del israelí: lo que sería una muestra más de su estado de insanía.&nbsp; 
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<h4>El hecho&nbsp;</h4> 
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Pyrhia Saroussy —la madre de Gil Pereg— y Lily Pereg —su tía—desaparecieron en Guaymallén el 12 de enero. Dos días más tarde, el hombre hizo una denuncia por averiguación de paradero. Casi inmediatamente los pesquisas notaron el extraño modo de vida que llevaba el denunciante y las sospechas se concentraron en él. El 25 de enero lo detuvieron. A las pocas horas los dos cadáveres de las mujeres fueron encontrados a un metro y medio bajo tierra, con signos de violencia e incluso con hierros clavados en sus cuerpos. 
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 <img alt="" data-height="444" data-size="w:800,h:444" data-width="800" hspace="5" src="https://assets.dev-filo.dift.io/img/2019/06/07/gil_pereg_3.jpg_699929495.jpg" title="" vspace="5"> 
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Se trata del hombre acusado de matar a su t&iacute;a y a su madre en Mendoza. Sus abogados aseguran que el hombre no puede ser sometido a proceso por su estado psiqui&aacute;trico.&nbsp;

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Se trata del hombre acusado de matar a su t&iacute;a y a su madre en Mendoza. Sus abogados aseguran que el hombre no puede ser sometido a proceso por su estado psiqui&aacute;trico.&nbsp;&nbsp;

Gil Pereg: insisten con una pericia para demostrar la inimputabilidad del israelí

Doble femicidio

Nicolás Gil Pereg, el hombre sospechado de matar a Pyrhia Saroussy (64) y Lily Pereg (53) en enero pasado, anticipó que se quitará la vida. Esta vez, el imputado —que jura ser un gato— dejó los maullidos para otro momento, pidió que lo trasladen a una institución psiquiátrica y avisó: “hace dos meses que estoy con depresión. Solo pienso en morir”. Ante el reclamo, el juez Eduardo Martearena ordenó que se lo trasladara al Hospital Pereyra, aunque los médicos resolvieron que no debía quedar internado. 
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Gil Pereg lleva meses quejándose sobre su estado de salud. Anteriormente contó que otros presos han querido atacarlo y manifestó que en la cárcel lo están drogando con antipsicóticos. Ahora retomó el tema. "Mi vida tiene valor, no es basura. Le pido que me internen en un hospital psiquiátrico para que me cuiden 24 horas y no pueda suicidarme. No estoy pidiendo mi libertad", reclamó. 
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La respuesta de la fiscalía no se hizo esperar. “Se ha visto la mejor actuación de Pereg —declaró el fiscal jefe de Homicidios Fernando Guzzo—. Habló de corrido y corrigió incluso los montos de dinero. A todas luces es imputable”. 
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 <img alt="Las hermanas israelíes asesinadas en Mendoza " data-height="444" data-size="w:800,h:444" data-width="800" hspace="5" src="https://assets.dev-filo.dift.io/img/2019/05/27/gil_pereg_3.jpg_699929495.jpg" title="Las hermanas israelíes asesinadas en Mendoza " vspace="5"> 
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 Las hermanas israelíes asesinadas en Mendoza 
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<h4>El destino de su plata</h4> 
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En las últimas semanas, Martearena anuló el embargo que se había establecido sobre el dinero del detenido, y ordenó que los 15.625 dólares y 25.180 euros que se le han secuestrado sean depositados en un plazo fijo, en vistas a abonar los honorarios de los abogados que defienden a Pereg. 
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Los letrados de la defensa han pedido 850 mil pesos. Por su parte, Pereg ha solicitado que se les entregue a ellos toda la plata. Ahí surge una encrucijada, ya que el juez dice que si Pereg es inimputable —como parece querer demostrar la defensa— entonces no puede decidir sobre el destino de sus fondos. En otras palabras: si está loco, es inimputable y no puede decidir el pago. Y si no está loco, es imputable y puede ir a la cárcel. Otra de las paradojas de una causa que seguirá dando que hablar. 
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Pyrhia Saroussy —la madre de Gil Pereg— y Lily Pereg —su tía—desaparecieron en Guaymallén el 12 de enero. Dos días más tarde, el hombre hizo una denuncia por averiguación de paradero. Casi inmediatamente los pesquisas notaron el extraño modo de vida que llevaba el denunciante y las sospechas se concentraron en él. El 25 de enero lo detuvieron. A las pocas horas los dos cadáveres de las mujeres fueron encontrados a un metro y medio bajo tierra, con signos de violencia e incluso con hierros clavados en sus cuerpos. 
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Tras su detención, Gil Pereg comenzó a actuar como un gato. Se esperan nuevas pericias para determinar si es imputable.

Gil Pereg dice que solo piensa en matarse

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