Donald Trump firmó este lunes el retiro de Estados Unidos del Acuerdo de París por el cambio climático. Parte del primer paquete de medidas de su segunda presidencia, esta decisión viene a retomar una política del primer período de Trump al frente de la Casa Blanca.
Qué es el Acuerdo de París
Firmado en 2015 durante la COP21 en París, Francia, este tratado internacional tiene como objetivo central limitar el calentamiento global a menos de 2 °C, con un esfuerzo para mantenerlo en 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales.
Entre sus principales puntos, establece que cada país firmante debe presentar metas de reducción de emisiones y actualizarlas periódicamente. Además, dice que las naciones desarrolladas deben apoyar a las que se encuentran en vías de desarrollo con fondos para mitigar los efectos de éste fenómeno.
De idas y vueltas
Estados Unidos suscribió este tratado en 2016, durante los últimos meses de la segunda presidencia del ex presidente Barack Obama. Sin embargo, en junio de 2017, Trump revirtió esta medida y anunció oficialmente la salida de Estados Unidos de éste tratado internacional. Lo hizo en el marco de su política "América Primero", un lema que apuntaba a priorizar los intereses económicos y de seguridad de EE.UU. en detrimento de compromisos multilaterales. Entonces, Trump sostuvo que el Acuerdo imponía cargas económicas injustas sobre su país y, además, que las políticas climáticas debían ser definidas internamente por cada país y no por acuerdos internacionales.
Si bien se anunció a mediados de 2017, el proceso de salida comenzó en 2019 y se concretó recién en noviembre de 2020, justamente un día después de que Joe Biden se impusiera en los comicios presidenciales de aquel año. Precisamente, fue Biden quien, ya como presidente, anuló esta medida y ordenó que EE.UU. regresara al tratado internacional.
Ahora, Trump, por razones más o menos similares, volvió a ordenar salir del pacto internacional contra el cambio climático. Si bien no se dará de forma automática, se espera que la salida del país de este tratado se concrete más rápido que la última vez, cuando demoró casi tres años y medio.
En una primera reacción a esta decisión, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, recalcó que el Acuerdo de París "sigue siendo la mayor esperanza de toda la humanidad". "Europa mantendrá el rumbo y seguirá trabajando con todas las naciones que quieran proteger la naturaleza y detener el calentamiento global", aseguró.