En un clima de máxima tensión, el presidente de Venezuela Nicolás Maduro planea este viernes extender su mandato hasta 2031. Las calles de Caracas amanecían en una tensa calma luego de las multitudinarias protestas de este jueves en las que miles de venezolanos volvieron a manifestarse contra el régimen. Este jueves, además, María Corina Machado abandonó la clandestinidad y fue protagonista de un confuso episodio en el que el chavismo habría intentado secuestrarla.

Asediado por la presión interna y externa, Maduro ordenó mover todo el aparato: instó a sus seguidores a salir a las calles y cerró las fronteras, con el argumento de que existe una "conspiración internacional" en su contra. Además, se prevé que durante la ceremonia esté rodeado de los miembros del Poder Judicial y las Fuerzas Armadas, su prinicipal sostén en esta situación.

Por su parte, el líder opositor, Edmundo González Urrutia, prometió volver a Venezuela este viernes para asumir el cargo que, afirma, le corresponde por haber ganado las cuestionadas elecciones presidenciales de julio pasado, en las que el oficialismo se proclamó ganador sin mostrar un solo dato oficial.

Es un gran interrogante, sin embargo, la estrategia que utilizará González Urrutia para ingresar a Venezuela sin ser detenido. Una versión indicaba que lo haría acompañado de una comitiva de presidentes y ex presidentes. En las últimas horas, el mandatario de El Salvador, Nayib Bukele, publicó en sus redes una imagen del reporte meteorológico de Caracas, dando a entender que se encuentra en la capital venezolana.

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