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La OEA calificó la detención del gendarme argentino en Venezuela como "un crimen de lesa humanidad"

Esto se suma a las medidas cautelares en favor de Nahuel Agustín Gallo que emitió la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

La OEA calificó la detención del gendarme argentino en Venezuela como "un crimen de lesa humanidad"

Este viernes, la Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) condenó la "detención arbitraria" del gendarme argentino Nahuel Gallo en Venezuela, calificando su caso como un "crimen de lesa humanidad" según el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.

La OEA expresó su "repudio y condena" ante la detención del agente de la Gendarmería Nacional Argentina por parte del régimen venezolano y afirmó que esta detención es una "clara violación de normas internacionales y de los principios fundamentales de humanidad y justicia que todos los Estados deben respetar".

Asimismo, la organización denunció que la "incomunicación y la negación de asistencia consular y legal" vulneran la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares. Estos hechos, según la OEA, constituyen una prueba más de la violación sistemática de los derechos humanos por parte del régimen venezolano.

La Secretaría General de la OEA exigió al gobierno de Venezuela que cumpla con los tratados internacionales sobre derechos humanos y relaciones internacionales. Además, solicitó que garantice la seguridad física de Gallo, le brinde asistencia legal, permita el contacto con su familia y lo libere "inmediatamente".

Esto se suma a las medidas cautelares en favor de Nahuel Agustín Gallo que emitió la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). "Se encuentra en una situación de gravedad y urgencia, toda vez que sus derechos a la vida e integridad personal enfrentan un riesgo de daño irreparable en Venezuela", afirmó el comunicado.

Por el momento, las autoridades venezolanas no le respondieron a la CIDH las solicitudes de información y declara que cumple con los criterios de gravedad, urgencia e irreparabilidad de su reglamento. Además, exigió a Venezuela a adoptar inmediatamente las medidas necesarias para proteger los derechos a la vida e integridad personal de Gallo y permita la comunicación con su familia y representantes legales. Al mismo tiempo, pidió que se garantice su acceso a las autoridades argentinas para que investiguen los hechos y se eviten situaciones similares en el futuro.