El electo presidente argentino, Javier Milei, sorprendió al invitar al mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, para que sea parte de su toma de posesión el próximo 10 de diciembre. Este último confirmó la invitación a través de una llamada telefónica, expresando su interés en ser parte del evento.

El contacto entre Milei y Bolsonaro se llevó a cabo a través de una llamada, donde el líder brasileño expresó en sus redes sociales: "Acabo de recibir una llamada telefónica de Javier Milei, en la que lo felicité por su victoria y me invitó a su toma de posesión. Hoy Argentina significa mucho para todos los que amamos la democracia y respiramos libertad".

En el video compartido por Milei, se le escucha decir: "Para mí sería un honor enorme si vinieran para la asunción el día 10 de diciembre, sería algo hermoso".

Las reacciones a esta invitación no se hicieron esperar. Analistas políticos coinciden en que este gesto representa un intento de aproximación entre dos figuras políticas que, si bien difieren en varios aspectos ideológicos, buscan establecer puentes para potenciar la relación entre Argentina y Brasil.

Sin embargo, la invitación también críticas y debates en la escena política local. Algunos sectores cuestionan la idoneidad de invitar a un mandatario con posturas controvertidas, mientras que otros ven en esta acción una oportunidad para fortalecer lazos y establecer diálogos constructivos.