Charly García, uno de los íconos de la música y la cultura popular argentina, será homenajeado en la ciudad estadounidense de Nueva York con motivo del 40° aniversario de su disco “Clics Modernos”, cuya producción musical y diseño de tapa se hizo la Gran Manzana.

La obra, una pieza clásica del rock argentino considerada por fans y expertos como el mejor trabajo solista del artista, representa una crítica a la sociedad de esa época - plena vuelta de la democracia tras el último golpe cívico militar en el país - y un registro claro de aquel momento histórico.

La idea de este homenaje que se llamará "Charly García Corner" estuvo a cargo de Mariano Cabrera, un actor argentino: "Gracias Consulado Argentino en New York por creer en mi proyecto, a las autoridades de la ciudad de NY y a quienes se entusiasmaron desde un primer momento", tuiteó.

El próximo 6 de noviembre, pocas semanas después del cumpleaños número 72 del máximo exponente del rock argentino que celebra cada 23 de octubre, a las 11 de la mañana (hora local de EE.UU) se perpetuará el nombre de García en la mítica esquina de Walker Street & Cortlandt Alley.

Allí, décadas atrás, el músico se sentó para inmortalizar la portada del álbum que salió a la luz el 5 de noviembre de 1983 y fue gestado completamente en Manhattan. "Hace mucho tiempo venimos con esta idea. Estamos con el Consulado argentino, detrás de la habilitación hace meses y ahora podemos confirmarlo", relató Cabrera a Página/12.

La pared original, donde estaba el grafiti, fue pintada y pertenece a un edificio donde actualmente funciona un hotel, cuyo chef principal es el argentino Fernando Trocca.

"El municipio no permite que se pinte porque es una propiedad privada y para evitar el vandalismo, pero ese día se va a colocar una señal que marque que desde ese momento es "Charly García Corner”, aclaró Cabrera.

"Esperamos que Charly pueda venir. De todas formas, esta va a ser siempre su esquina”, resaltó Cabrera.

Un poco de historia de "Modern Clics"

El disco que acabó siendo uno de los mejores de la historia de la música argentina comenzó como un viaje a Estados Unidos de ocio y compras. Autoproducido y compuesto por García, fue grabado casi totalmente en el Electric Lady Studios, que había sido creado por el guitarrista estadounidense Jimi Hendrix, en Greenwich Village.

El disco cuenta con canciones como "No soy un extraño", "Nos siguen pegando abajo", "Los dinosaurios", "No me dejan salir" y "Ojos de videotape", entre otras, que reflejan la perspectiva del compositor sobre la sociedad argentina de ese momento.

(Mítica esquina de Walker Street & Cortlandt Alley)

Instalado en Nueva York, se dedicó a profundizar en la escena musical de la Gran Manzana y a comprar equipos para hacer su próximo disco. Cuando el concepto estaba, eligió el título y llamó a Uberto Sagramoso, su histórico fotógrafo, para que lo retrate en algún lugar de Manhattan.

Originalmente se iba a llamar “Nuevos Trapos”, contó García en una nota, pero una imagen de una silueta negra - pintada por el grafitero canadiense Richard Hambleton- le trajo a la memoria las imágenes difundidas por las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo y todo cambió.