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Estilo #amor#Relaciones

#AlFilo: Contra todos los pronósticos, se puede ser auténtico y sin poses

No me creo una superheroína porque no voy a salvar el mundo, pero sí tengo pensado salvar el mío. ¿Cómo? Siendo auténtica y eso es sobre lo que quiero reflexionar junto a vos
#AlFilo: Contra todos los pronósticos, se puede ser auténtico y sin poses

Supe ser aquella mujer que la sociedad impone, la que se atiene a los tiempos de los hombres e incluso la que programa cada paso antes de darlo. Una mujer llena de estructuras para encajar en el sistema amoroso que se nos propone.

Pero eso tuvo su punto de declive. De repente pude ver que la vida no se detiene a esperarte ni te recompensa con nada si hacés las cosas tal cual son pautadas. ¿A quién se le ocurrió que para responder un mensaje hay que esperar cierta cantidad de tiempo o que las mujeres no deben halagar a sus conquistas? ¿A quién se lo ocurrió que la mujer no puede tener sexo en la primera cita o que no puede ser ella quien encare al chico que le gusta?

"¡No! Si no me escribe él primero, yo no le voy a escribir". ¡Al diablo con eso! Las estructuras no nos conducen a ningún lado, más bien nos encierran cada vez más, en una caja que se va haciendo más y más chica.

Ya me cansé, me cansé de seguir "estos mandamientos". Pude comprobar, con el paso del tiempo, que actuando totalmente diferente a lo que era esperado, las cosas que me proponía o esperaba sucedían igual. Me tomé el atrevimiento de ser libre, de respetar mis sentimientos y no reprimirlos. Si quiero responder un mensaje al segundo de que me llega, tomar la delantera e iniciar la conversación (yo todos los días), lo hago. Si quiero hacerle saber al chico que me gusta que realmente me atrae, lo hago. Actúo sin miedos, sin tapujos, sin prejuicios.

Al fin y al cabo, estamos hechos de lo mismo y no me parece justo que el hombre deba hacerlo todo: encarar a la chica, conquistarla y mostrarse como el "macho" que todo lo puede. Tampoco me parece justo que nosotras tengamos que callar. Me acostumbré a decir lo que pienso, lo que siento y lo que espero de las relaciones: todo a su debido tiempo, para sufrir menos diría yo.

Puede funcionar como una ventaja o una desventaja, eso dependerá con qué tipo de personas nos crucemos en el camino. No muchos lo aceptan porque casi nadie está acostumbrado a que eso suceda, más bien siempre todos se me han sorprendido, pero no deja de gustarme. Es hora que vayamos al frente: que nos mostremos genuinas y como somos, sin poses. Por autenticidad o naturalidad, también podemos gustar a un otro.

No miento, ni disfrazo, ni maquillo, ni escondo. No me creo revolucionaria ni mucho menos, pero sí me creo feliz, prevalezco mi bienestar para vivir mucho mejor. ¡Y ojo! No es tampoco un pensamiento feminista, los hombres también deberían arriesgarse de la misma manera, porque en estos tiempos que corren, cualquiera sea el género, vivimos atados a las especulaciones, a una mirada externa, a una voz que nos dice cómo deberíamos actuar.

¡Basta! Sentí, hacé, viví. No hay muchas vidas posibles, de hecho no creo que haya más de una, y si la hay, vivilas todas al máximo, no tenés nada por perder. Uno de los mejores sentimientos es el amor, ¿y qué mejor que disfrutarlo en todas sus manifestaciones? El amor duele, sana y completa, es lo que hace sentir verdaderamente, de nada sirve vivir en las sombras si podemos brillar por nuestra autenticidad.

Foto: Shutterstock

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