Ekaterina Mezenova (24) se convirtió en mamá hace un año y medio y hasta ahora no había hablado sobre la enfermedad que padece su pequeño hijo.

Ella es una influencer rusa, con mucha popularidad en Instagram, que decidió hacer un uso del alcance que tiene para poder difundir y concientizar sobre lo que es el nevus.

"La sala estaba llena de enfermeras, obstetras, terapeutas, genetistas, todos se congregaron alrededor de mi bebé, discutiendo su aspecto, que ocupaba casi toda la superficie de la piel. Más tarde se estableció que se trata de un nevo, es decir, una marca de nacimiento gigante que conlleva un peligro oncológico: cualquier trauma, tanto químico como físico, un aumento hormonal y cualquier otro cambio en el cuerpo puede provocar cáncer de piel", contó respecto al día de su parto.

Desde aquel entonces en las fotos que mostraba del pequeño siempre se lo veía vestido con ropa que le tapara todo el cuerpo. Pero ahora le contó su historia al mundo.

Según los médicos, los nevus o lunares congénitos son un tipo de lesión pigmentaria de la piel que aparece en el nacimiento, cuyo control es importante para evitar enfermedades o el riesgo de padecer melanoma.

Pueden tener un aspecto muy variado: desde una pequeña mancha hasta ser una lesión sobreelevada y de color marrón oscuro. Se localizan preferentemente en el abdomen, hombros y extremidades. Los más grandes pueden estar recubiertos de pelo y pueden llegar a cubrir áreas completas. La pigmentación puede ser irregular adquiriendo diferentes tonalidades de marrón y la superficie se puede tornar rugosa.

Como bien detalló Mezenova, eliminar todos los nevus no es posible, pero sí se pueden reducir los riesgos para el niño. El tratamiento a realizar tendría un costo de más de USD 450 mil y se realizaría durante seis o siete años, y ella contó que ya comenzó a recaudar dinero para poder solventar este tratamiento a realizar en Israel.