El árbitro Silvio Trucco se llevó todas las miradas y los insultos en el Pedro Bidegain después de un pésimo arbitraje en el clásico del domingo entre San Lorenzo y Boca, que terminó con el Ciclón con 9 jugadores.
El primer fallo de la terna arbitral fue en la jugada del gol de Carlos Tévez que derivó en el empate del Xeneize: a pesar de que la situación fue milimétrica, el delantero estaba un paso adelantado cuando partió el centro de Leonardo Jara.
Más tarde, todavía en el primer tiempo, Trucco acertó al expulsar a Facundo Quignón: en su segunda falta del encuentro, el volante fue imprudentemente al suelo, derribó a Tévez y se ganó la roja.
En la segunda parte, el juez cometió sus errores más groseros. En el comienzo del complemento, Gabriel Gudiño fue a disputar una pelota con Emmanuel Mas, que rechazó y se cayó sin que su rival lo tocara.
El despeje del defensor de Boca le quedaba a un futbolista de San Lorenzo para irse solo contra el arco de Agustín Rossi, pero Trucco insólitamente decidió cobrar una falta.
A los 30 de la segunda etapa y en un tiro libre para el Ciclón, Mas abrazó a Fabricio Coloccini cometiéndole un grosero penal, que el encargado de impartir justicia ignoró.
A pocos minutos del final, Trucco cometió su más grave fallo al considerar el choque entre Gabriel Rojas y Wilmar Barrios como falta del jugador azulgrana, cuando las imágenes muestran claramente una infracción del volante visitante.
El árbitro decidió expulsar al lateral Cuervo y así dejó al conjunto de Claudio Biaggio con 9 jugadores.
En la última y a sabiendas de su pésima noche, Trucco coronó su actuación: Fernando Belluschi bajó a Mas a centímetros del área grande, pero el juez no se atrevió a cobrar la infracción.
El lateral izquierdo Xeneize, más tarde, protestó por el penal, pero el golpe había sido fuera del área. Era una situación para analizar con el VAR, pero de todos modos la falta existió.
De esta manera y con graves fallos arbitrales, el caliente duelo entre el líder y el escolta de la Superliga terminó igualado 1 a 1. Vos, ¿por qué creés que se dieron los errores?