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El médico del Papa contó cómo fueron sus últimos momentos: "Me di cuenta que no había nada más que hacer"

Sergio Alfieri describió su último encuentro con Francisco. También explicó por qué decidieron no trasladarlo al Hospital Gemelli.

El médico del Papa contó cómo fueron sus últimos momentos: "Me di cuenta que no había nada más que hacer"

Sergio Alfieri, médico personal de Francisco, reveló su último encuentro con el Papa y contó cómo lo encontró la madrugada del lunes, cuando se constató su fallecimiento a los 88 años. En declaraciones a medios italianos, que este jueves reprodujo el diario Corriere della Sera, Alfieri recordó el momento en que le advirtieron que algo no andaba bien.

"El lunes alrededor de las 5:30 me llamó [Massimiliano] Strappetti -enfermero personal del Sumo Pontífice-: 'El Santo Padre está muy enfermo, tenemos que volver a Gemelli'. Prealerté a todos y veinte minutos después estaba allí en Santa Marta, pero parecía difícil pensar que fuera necesaria la hospitalización. Entré en su habitación y tenía los ojos abiertos. Me di cuenta que no tenía problemas respiratorios y luego intenté llamarlo pero no respondió. No respondía a los estímulos, ni siquiera a los dolorosos. En ese momento me di cuenta que no había nada más que hacer. Estaba en coma", reconstruyó Alfieri el cuadro con el que se topó esa mañana.

Respecto de la posibilidad de trasladarlo, Alfieri explicó que "habría sido inútil". "Corríamos el riesgo de dejarlo morir durante el transporte, le expliqué que la hospitalización habría sido inútil. Strappetti sabía que el Papa quería morir en casa, cuando estábamos en Gemelli siempre lo decía. Falleció poco después. Me quedé allí con Massimiliano, Andrea, las otras enfermeras y las secretarias. Entonces todos llegamos y el cardenal Parolin nos pidió que rezáramos y rezamos el rosario con él. Me sentí privilegiado y ahora puedo decir que lo fui. Esa mañana le di una caricia como última despedida", dijo.

Alfieri contó que vio por última vez a Francisco el sábado, después de comer, en vísperas de Pascua. "Puedo decir que estaba muy bien, él también me lo dijo. Le traje una tarta oscura, tal como a él le gusta, y charlamos un rato. 'Estoy muy bien, he vuelto a trabajar y me va bien'. Sabía que al día siguiente daría el Urbi et Orbi y quedamos en encontrarnos el lunes”.

También sostuvo el médico cirujano que Francisco necesitaba trabajar como parte de su terapia de recuperación. "Es como si, al acercarse al final, decidiera hacer lo que tuviera que hacer. Tal como ocurrió el domingo, cuando aceptó la propuesta de su asistente sanitario personal, Massimiliano Strappetti, de pasear por la plaza entre la multitud. O como lo hizo hace diez días".