Se llevó adelante una nueva edición de los Oscars: en esta oportunidad, la gran ganadora de la noche fue "Green book", aunque "Roma" y "Bohemian Rhapsody" también fueron coronadas en varias categorías.

Justamente, Alfonso Cuarón fue elegido como "Mejor director" y se llevó la ovación de todos los presentes. Cuando subió al escenario, su amigo Guillermo del Toro estaba esperándolo para entregarle la estatuilla.

Sin dudas, el mexicano tenía más que merecido ese premio. Sin embargo, lo que más llamó la atención es que fue seleccionado dentro de un grupo de cinco directores, sin ninguna incorporación femenina que pueda pelear el puesto. 

¿Por qué la Academia decidió -otra vez- que no haya mujeres nominadas a esta categoría? En ese contexto, Filo.News dialogó con Virna Molina, cineasta y realizadora integral argentina, para conocer detalles del tema y cómo impacta esta situación en nuestro país.

Oscars: ¿industria patriarcal?

La mujer de la foto es Jennifer Fox, productora y directora de cine estadounidense que creó "The tale", la película que cuenta la historia de abuso sexual infantil que sufrió ella misma durante su infancia. 

El film fue muy aclamado por la crítica; según indicó Rotten Tomatoes, tiene una aprobación de 98%. Sin embargo, muchos no vieron la película, o no la conocían. No es casualidad: Fox forma parte de una numerosa cantidad de directoras opacadas por la industria.

"Los Oscars responden a la lógica patriarcal que domina la industria del cine. Es coherente que en ese mundo las mujeres ocupemos más un espacio secundario, más de objeto, que de conducción", opinó Molina. 

Justamente, la ceremonia potencia y refuerza ese pensamiento con cada una de sus entregas: "Se premia un tipo de cine que se hace y se piensa bajo una lógica patriarcal capitalista, en ese sentido quedan dos caminos o las mujeres reproducimos esa lógica para ser premiadas o no somos premiadas".

Kathryn Bigelow fue la única mujer que se llevó el premio a mejor director en la historia de los Oscars, gracias a su trabajo con "The Hurt Locker" (2010). En total, hubo cinco mujeres nominadas a ese puesto, entre las que se ubican Lina Wertmüller (1977), Jane Campion (1994), Sofia Coppola (2004) y Greta Gerwig (2018).

Según la opinión de Molina, acceder a ver películas de directoras mujeres, en muchos casos, se vuelve difícil ya que el mercado de la distribución está en manos de un "monopolio que selecciona rigurosamente que se ve masivamente en el mundo y que no".

¿Y en Argentina?

Lorena Muñoz, Lucrecia Martel, Ana Katz, María Teresa Costantini, Lucía Torres... existe una numerosa cantidad de directoras mujeres en la industria argentina. Sin embargo, también sufren la discriminación que padecen las profesionales en la Academia.

Según explicó Molina, si comparamos el número de estudiantes egresadas de carreras de cine y el número que ejerce la profesión tenemos un "abismo insalvable". El panorama es impactante: según indicó el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), de 1.627 películas que se hicieron durante la última década (2007-2017) solamente 284 fueron dirigidas por mujeres. 

"El proceso de financiación de films ha sido notable y esto está impactando en la calidad y cantidad de films producidos. En ese sentido, las mujeres nos vemos más fuertemente damnificadas ya que dentro de la estructura de producción somos sistemáticamente relegadas a la hora de ocupar puestos de trabajo como técnicas y/o directoras", explicó Molina.

Frente a esto, la realizadora agregó: "Si el Estado Nacional a través del INCAA y demás organismos públicos tomara una política de género en lo que respecta al fomento a la producción, seguramente en pocos años el numero de directoras, productoras y técnicas de la industria nacional de cine llegaría a porcentajes mas sanos que los actuales y nuestras voces no serían invisibilizadas como lo son hoy".

¿Qué rol juega feminismo en este camino?

En el festival de Cannes de 2018, un grupo de mujeres se reunió en la alfombra roja para pedir igualdad en la pantalla grande. Luego de la explosión del movimiento #MeToo y Time's Up, 82 artistas se pararon frente a las cámaras para hacerse oír.

En Argentina, en julio del año pasado más de 400 artistas se unieron para pedir al INCAA por mayor equidad de género en el cine argentino. A través de una carta, directoras, actrices, montajistas, técnicas y demás profesionales se unieron para luchar por la incorporación femenina.

Como se puede ver, el feminismo juega un papel fundamental en esta lucha: "Es una herramientas concreta real para revertir la desigualdad establecida por el sistema productivo patriarcal jerárquico capitalista", afirmó Molina.

"Creo que las luchas actuales nos dan una segunda oportunidad para repensar como desde nuestra subjetividad de mujeres oprimidas podemos construir otros vínculos, otros lazos productivos, otro sistema que nos lleve hacia un equilibrio entre todxs los que integramos esta sociedad, en equilibrio también con nuestro espacio natural de coexistencia", aseguró.

Luego, añadió: "Tengo fe en la construcción de una lógica sostenida por la diversidad y el respeto de todas las voces. Si eso nos  guía en nuestra lucha -como seres oprimidas que no queremos reproducir la opresión - llegaremos a lugares impensados que generaran mucha claridad e igualdad en este mundo caótico e injusto que nos toca vivir".