Robert Pattinson, el actor mundialmente conocido por su rol en la serie Crepúsculo y su participación en Harry Potter, sería el elegido por Matt Reeves ("La Guerra del Planeta de los Simios") para convertirse en el próximo Batman. Aunque algunos reportes aseguran que Nicholas Hoult (“X-Men: Days of Future Past”, “Tolkien”) también estaría en carrera, todo parece indicar que la balanza se inclinará definitivamente por Pattinson y firmará el contrato en las próximas semanas.
Como no podía ser de otra manera, internet no reaccionó bien a la noticia, ya que el actor continúa siendo identificado por su rol como el vampiro brillante Edward Cullen, el personaje que lo convirtió en la debilidad de incontables fanáticos alrededor del mundo y le aseguró un futuro como el próximo galancito de Hollywood. Un futuro del que ha intentado escapar por años.
Definir la carrera de Pattinson por su participación en la saga Crepúsculo es como pensar en Leonardo DiCaprio como la cara bonita de “Romeo & Julieta” y “La Playa” y olvidar sus trabajos anteriores y posteriores junto a directores de la talla de Martin Scorsese, Steven Spielberg, Ridley Scott, Quentin Tarantino, Christopher Nolan y Alejandro Iñárritu.
La diferencia entre ambos es que las películas de Leonardo DiCaprio después de convertirse en una celebridad han sido en su gran mayoría superproducciones taquilleras, mientras que Pattinson decidió alejarse lo más posible del estigma del galán de producciones YA (“young adult”, la categoría que define obras como las de Stephenie Meyer) y volcarse al cine independiente. El actor consiguió imprimirle una sensibilidad particular incluso a sus papeles más convencionales en historias de “chico conoce chica” como “Recuérdame” (“Remember Me”, 2010).
Entre su debut como Edward Cullen en 2008 y este 2019 Pattinson participó en una docena de películas que confirman su amplio rango y su constante crecimiento, aunque ese crecimiento llegue de la mano de fracasos de taquilla. El actor que demostró pasarla muy mal durante los cuatro años que tomó completar la serie que lo convirtió en una estrella (hay infinidad de entrevistas en las que denosta a su personaje, el argumento, a la autora de los libros y hasta a los fanáticos) decidió arriesgarse para demostrar que tenía mucho para ofrecer.
David Cronenberg (“Una historia de violencia”, “Promesas del este”) lo convocó para protagonizar sus dos últimos proyectos: "Cosmópolis" (2012), un drama reaccionario anticapitalista, y el thriller “Polvo de Estrellas” (“Maps to the Stars”, 2014), en los que Pattinson maneja el contraste de la ambiciosa apatía de un joven multimillonario con la indeclinable convicción de un trabajado con grandes sueños de forma impecable.
En 2014 el actor también se puso a las órdenes de David Michôd (“Animal Kingdom”) en el drama postapocalíptico “El Cazador” (“The Rover”), que el director escribió junto a Joel Edgerton (“The Gift”), donde demostró que no tenía miedo a ensuciarse un poco y abandonar la imagen de niño lindo, que confirmó en “Good Time”, el extraordinario drama filmado con dos pesos por los hermanos Benny y Josh Safdie (“Heavens Knows What, 2014) en 2017 que no vio nadie pero fue celebrado por la crítica internacional y catalogada como una de las mejores películas de ese año.
Incluso los grandes fracasos como “Queen of the Desert”, la historia de la arqueóloga y exploradora Gertrude Bell (Nicole Kidman) fueron parte de un proceso de crecimiento. La película puede no tener mucha pinta, pero cuando Werner Herzog llama nadie se atrevería a no contestar el teléfono.
Podríamos seguir nombrando proyectos como “Life” (2015), “The Lost City of Z” (2017) o la extraña comedia “Damsel” (2018), pero elegimos cerrar este repaso de la carrera de Pattinson con “High Life”, la joyita de suspenso y ciencia ficción de Claire Denis que pasó por varios festivales durante el año pasado y tuvo un estreno limitado en cines, pero anda dando vueltas por algunos servicios de streaming.
Si se han perdido la filmografía de este gran actor por prejuicio denle una chance a “Good Time”, “The Rover” o “High Life” para saber qué esperar del próximo Bruce Wayne. Más de uno se sorprenderá.