El revuelo por “El Irlandés” (The Irishman, 2019) no parece tener un final a la vista, y eso que todavía falta ver su ‘performance’ durante la temporada de premios. Su estreno en salas locales -aunque escueto- demostró que la gente sí se banca tres horas y media de buen cine cuando viene de la mano de un artista como Martin Scorsese, quien (junto con el presupuesto y la producción) debió aceptar el sistema de distribución de Netflix, porque entendió que esta colaboración con el gigante del streaming era la única posibilidad de concretar esta epopeya cinematográfica.
Si bien, el director no puede hacer mucho al respecto en cuanto a la forma en que los espectadores deciden ver su película -disponible en la plataforma desde el 27 de noviembre-, igual se tomó la molestia de tirar unos consejitos y evitar (en lo posible) disfrutarla desde la minúscula superficie de un teléfono celular, o similares. Claro, la idea es poder ver a Al Pacino, Robert De Niro y Joe Pesci (o cualquier film, en general) en la pantalla más grande que sea posible, una sugerencia que, como todo por estos días, las redes sociales se tomaron a la chacota y en seguida comenzó la proliferación de memes.
En conversación con Peter Travers, crítico de Rolling Stone, Marty declaró: “Sugeriría, si alguna vez quieren ver una de mis películas, o la mayoría de las películas, por favor, no las miren por teléfono, por favor. Un iPad, un gran iPad, tal vez”, bromeó el realizador (o no), tratando de dejar su punto en claro. Las opiniones divididas no se hicieron esperar a lo largo y ancho de Internet, donde surgieron los defensores del ritual fílmico y las salas de cine como única opción viable, y aquellos menos pretenciosos que no se inmutan viendo la historia de Frank Sheeran durante un viaje (o varios) de subte.
Tampoco faltaron lo que armaron cuidadosas guías de visualización, dividiendo la película en “episodios” como si se tratara de una miniserie. Cualquiera puede poner pausa, irse a dormir y retomar al día siguiente, pero a Scorsese no le gustó este formato serial separado de manera tan aleatoria: “Porque el objetivo de esta película es la acumulación de detalles. Es un efecto acumulativo acumulado al final de la película, lo que significa que se puede ver de principio a fin [de una sola vez] si estás tan dispuesto. Una serie es genial. Es maravilloso. Podés desarrollar personajes, trazar líneas y recrear mundos, pero esto no era lo correcto en este caso”, deja bien en claro el realizador que tiene experiencia en ambos medios, si no, chequeen “Boardwalk Empire” (2010-2014) y “Vinyl” (2016).
“El Irlandés” ya figura en casi todas las listas de lo mejor del año, y seguramente será uno de los títulos que más suene en la entrega del Oscar de 2020. Imposible saber cuánta gente la verá en el cine o a través de Netflix ya que la compañía no revela sus números, pero se intuye que estas cifras son altas porque el nombre de Scorsese todavía tiene su peso entre las audiencias. Si no, no habría tanto revuelo, ¿no es cierto?