El término "La casa del horror" nunca estuvo mejor utilizado: en una vivienda de la provincia de Santiago del Estero, un hombre abusaba sexualmente de sus hijas y, cuando quedó inválido tras un accidente, ordenó a los hermanos que continuaran con los abusos.
También golpeaba y maltrataba a la madre de las víctimas, a quien conoció cuando él tenía 36 años y ella 12, y con quien tuvo 10 hijos. Ahora, tras su fallecimiento -cuya causa se desconoce-, la Policía busca intensamente a dos jóvenes de 17 y 22 años, los hermanos que sometieron sexualmente a sus hermanas.
A pesar de que existen al menos 13 denuncias en contra del agresor, el caso recién trascendió cuando una de las víctimas, de 14 años, logró contarle su terrible situación a una de sus maestras.
Fue a partir de allí que la Justicia tomó cartas en el asunto y decidió alojar a la madre y las víctimas en un hogar. "Mi vida era de lo peor, pero después empezó a abusar de mi hija que ahora tiene 22 años. Le pregunté por qué y me golpeó.Tanto me faltó el respeto que mis hijos, de 22 y 17 años, se animaron también a golpearme", relató la mujer al diario El Liberal días atrás.
El horror no afectó sólo a las hijas: otro de los hijos varones de la pareja, que padece de discapacidad, fue encontrado encadenado a un árbol cuando la Policía irrumpió en la vivienda. Él también se halla refugiado junto a su mamá y hermanas.
Mientras tanto, la fiscal Cecilia Rímini, a cargo de la causa, prepara el requerimiento de las detenciones de los dos jóvenes acusados de continuar con las aberraciones de su padre. Se estima que habrían viajado a Buenos Aires la semana pasada.