"Desde este momento cancelo el trato del anterior gobierno con Cuba. No vamos a levantar las sanciones al régimen cubano", declaro Donald Trump, durante un acto celebrado en el emblemático teatro de Manuel Artime, en el barrio de Little Habanna en Miami.
Como lo hizo anteriormente con el Acuerdo de París, y como se espera que lo realizará con el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), el republicano rebobinó los duranpactos de "deshielo" firmados por Barack Obama te 2015 y 2016.
Si bien el congelamiento de las relaciones no es total, se presentarán enormes restricciones en cuanto a la presencia de empresas estadounidenses en Cuba. Respecto al turismo, se vendrán mayores controles pero es un hecho que no se cancelarán los vuelos directos entre las naciones.
En cuanto a las cuestiones políticas, Estados Unidos no proveerá más dinero hacia Cuba, debido a que se mantenía el flujo económico para que se mantenga el comunismo y, según afirmó Trump y algunos ciudadanos cubanos, "reprimía al pueblo".
“Pongan fin al abuso a los disidentes, liberen a los presos políticos, ábranse a mayores libertades políticas”, remarcó el magnate republicano durante su presentación en Miami. Además aseguró que buscarán las elecciones libres con apoyo internacional en Cuba.
El presidente Trump también estuvo acompañado y recibió el apoyo de los congresistas de origen cubano Díaz Balart, Rubio, el gobernador de la Florida, Rick Scott, y Pence en el anunció que sentencia las políticas de Obama. “Que Viva Cuba Libre, Cuba sí, Castro No”, expresó el vicepresidente.
"Retamos a Cuba a que venga con un nuevo acuerdo que beneficie a los cubanos y a los estadounidenses", sentenció el mandatario, pocos segundos antes de firmar el decreto en Little Habana.