Trabajadores de la Fábrica Militar de Santa Fe en "alerta" por posibles despidos
Los empleados de la Fábrica Militar Fray Luis Beltrán advierten que ya circulan listas con entre 80 y 120 nombres que podrían ser desvinculados
En la Fábrica Militar Fray Luis Beltrán, de Santa Fe, hace tiempo que se vive una situación de tensión: en diciembre pasado hubo 35 despidos y ahora temen que se sumen otros 120.
Las situaciones vividas en otras sedes de fabricaciones del mismo rubro, como Azul, Villa María y Río Tercero, alimentan la sensación de malestar y la idea de que las desvinculaciones podrían efectivamente llevarse a cabo.
De acuerdo a lo revelado por Fernando Peyrano, delegado de la Junta Interna de la fábrica, "ya están circulando listas" con nombres de entre "80 y 120" operarios que serían desafectados en las próximas horas, en el marco de un ajuste presupuestario.
Según Peyrano, el Gobierno nacional ya había anunciado un recorte de $50 millones al presupuesto destinado al torreón ubicado en Fray Luis Beltrán para obras edilicias e instalaciones eléctricas.
De hecho, el jefe de gabinete Marcos Peña firmó el pasado miércoles 16 de mayo la Decisión Administrativa N° 1038, que asienta distintas reasignaciones presupuestarias, modificando el destino de $323 millones, previstos para obras y equipos de Fabricaciones Militares en todo el país.
La decisión tuvo lugar después de que Dirección General de Fabricaciones Militares, organismo actuante en la órbita del Ministerio de Defensa, propusiera "reforzar sus gastos corrientes en detrimento de los de capital", dice la decisión administrativa.
"El número podría llegar a triplicar los últimos despidos: entre 80 y 120 puestos", advirtió Peyrano
"El fin de estas personas no es manejar las inversiones, sino hacer listas y seguir reduciendo el personal. Lo digo abiertamente y con toda la soltura del mundo, como lo hacen ellos. Ya lo vivimos en diciembre, lo veníamos anunciando y ellos decían que era cuestión política", manifestó.
El vocero de los empleados explicó que en la actualidad la planta están trabajando con "las líneas estándar", lo cual determina "poco trabajo y sin reactivación de la fábrica".
"No están produciendo chalecos, ni municiones, ni artillería. Al dejar planteles básicos, se acercan a las cifras que nos dejaron en 1996", sostuvo Peyrano en declaraciones a la prensa santafesina.
La preocupación de los trabajadores también radica ahora en la aplicación de un artículo que le permite a la empresa abonar la mitad del sueldo ante la falta de rentabilidad.
"Años anteriores teníamos la lucha del convenio colectivo por el pase a planta permanente, había abundancia de trabajo; hoy estamos hablando de una desidia total", se quejó el delegado.