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Actualidad #Inflación#tarifazo#recesión

Reforma laboral textil en suspenso ¿Qué piensan los empresarios?

Ante un acuerdo de flexibilización en las condiciones de empleo del sector textil el Ministerio de Producción se encontró con el rechazo gremial y empresario. En Filo.News hablamos con Raúl Hutin, dirigente textil PyMe para profundizar en los motivos.

Reforma laboral textil en suspenso ¿Qué piensan los empresarios?

El gobierno insiste con la reforma laboral, sin embargo el rechazo social es amplio y no consigue el apoyo suficiente en el Congreso. La nueva estrategia, ante las exigencias del acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional, tiene que ver con implementarla a través de acuerdos sectoriales, sin pasar por el poder legislativo.

Para conocer más sobre el sector Filo.News entrevistó a Raúl Hutin, dirigente textil pyme hace más de 50 años, secretario de la Central de Entidades Empresarias Nacionales, vicepresidente de la Unión industrial de Moreno y vocal de la Fundación Pro Tejer.

"Esta maniobra que intentó el gobierno de meter un caballo de troya a través del sector más golpeado, el textil, es una maniobra donde todos pierden." exclama el empresario pyme.

El primer intento fue en el sector textil, uno de los más golpeados por la recesión que sigue en curso. Según el dirigente textil el rubro se encuentra con más de 20 puntos de capacidad ociosa de su promedio histórico. Los últimos datos del INDEC, de noviembre de 2018, muestran que el uso de la capacidad textil fue levemente superior al 40%, menos de la mitad de su potencial real. El empresario asegura que será peor para diciembre, enero y febrero donde "esta todo frenado". 

La Reforma Laboral

El Acuerdo Compromiso por la Producción y el Empleo de la Industria Textil e Indumentaria, adelantado por Mariano Martín para ambito.com, va en la misma dirección que la reforma laboral integral presentada por el ejecutivo el año pasado:

  • Abaratar indemnizaciones a través del "fondo de cese laboral".
  • Abaratar el pago de vacaciones y aguinaldo habilitando el pago en cuotas.
  • Flexibilizar las jornadas de trabajo con el "banco de horas".
  • Regularizar el trabajo a domicilio.

En palabras de Hutin, el acuerdo "apunta a destruir las condiciones de trabajo y pauperizar el salario de la gente. Cada uno ahorra para sus propia indemnización, hay un banco de horas por lo que el trabajador queda a disposición del empleador, un régimen casi esclavizante que además borra las horas extra." 

En el mismo sentido, la regularización del trabajo a domicilio no es menor ya que se pasaría a legalizar formas de trabajo que rozan la esclavitud. Debemos tener en cuenta que en la fabricación textil la informalidad supera por más de 20 puntos la media de la economía argentina y se acumulan las denuncias sobre trabajo esclavo sobretodo en las grandes marcas. 

"Se ganó la batalla, pero no la guerra"

Pero incluso en este panorama completamente desalentador para las pymes textiles la estrategia tuvo un primer intento fallido y las promesas de mejoras a partir del acuerdo no surtieron efecto. En este caso, el rechazo vino tanto de los trabajadores como de los empresarios.

"Van a seguir intentos de avanzar por las presiones del FMI, nosotros vamos a seguir peleándola. Lo interesante es que por primera vez sindicatos y empresarios se unen en el mismo objetivo, siendo el único camino posible para salir de esta crisis", pronostica Hutin.

Por su parte, los empresarios dejaron en claro que no es lo que necesitan. Sus problemas no tienen que ver con el tan difundido costo laboral sino con un mercado interno que no responde, con un crédito imposibilitado por las altas tasas de interés que mantienen estable al dólar y con tarifas dolarizadas que encarecen toda la cadena productiva.

"Textil vende casi exclusivamente al mercado interno, necesitamos que la gente tenga poder adquisitivo para que se pueda comprar una pilcha sino no trabajamos mas", enfatiza el dirigente. 

El frente externo no parece mejor, "entre 2007 y 2017 la cantidad de pymes que exportaban cayó 50% y no caímos más, me incluyo, porque queremos mantener esa puerta abierta con los clientes que conseguimos. Cada vez es más difícil, hoy estamos pagando para exportar el  12% de recargo, si a eso le sumamos las tarifas, entonces va a ser imposible también exportar. Me cerrás el mercado interno y el externo y entonces no tengo más que cerrar la fábrica."

¿Hay 2019?

Lo preocupante del panorama es que no parecen haber intenciones de mejorar el meollo del problema: la estrepitosa caída del consumo. "No hay motor para la producción" en palabras de Hutin. El empresario pyme denuncia que el único interés del gobierno es mantener estable el dólar, con las altas tasas de interés que eso confiere y la recesión que estamos viviendo.

En cuanto a las perspectivas para este año, el dirigente del sector textil ve una continuidad en la pérdida del poder adquisitivo. "Siendo optimistas podemos pensar en una inflación que ronde el 40% y las paritarias se están discutiendo en torno al 23%. Incluso si llegan al 30% van a perder contra el aumento de precios". Cada caída del poder adquisitivo es un golpe al bolsillo de la gente y un nuevo achicamiento de un mercado interno donde se vuelca el 98% de la producción textil pyme. 

A su vez, el creciente stock de Leliqs (Letras de Liquidez) también marca los límites de mantener el dólar a ese costo. "Los mercados saben que el gobierno no tiene las condiciones necesarias y suficientes para hacer frente a los millones de Leliqs que esta emitiendo y se le van a dar vuelta. Nosotros calculamos que será en junio, los mercados se adelantan porque no se la van a jugar."