Reynaldo Bignone, el presidente de facto que encabezó el final del proceso militar antes del retorno a la democracia, falleció este miércoles a los 90 años en el Hospital Militar, donde permanecía internado.
El represor fue condenado por las causas del Plan Cóndor y Automotores Orletti. Además fue varias veces condenado por delitos de lesa humanidad. El año pasado, la Justicia le dictó prisión perpetua por la causa que investigaba delitos ocurridos entre 1976 y 1977 en el Colegio Militar de la Nación.
El 1 de julio de 1982 fue nombrado presidente de la Argentina, sustituyendo a Leopoldo Galtieri, depuesto tras la derrota militar en Las Malvinas. Su mandato abarcó el período entre el 1 de julio de 1982 y el 10 de diciembre de 1983.