Las estafas piramidales se reinventan y atacan al mundo cripto
Promesas de un elevado crecimiento económico, discursos de empoderamiento y la llamativa propuesta de “ser tu propio jefe” son los elementos clave para empezar a reconocer una estafa piramidal.
Hoy en día, y en un contexto financiero adverso, los esquemas ponzi siguen vigentes en Argentina, pero ahora se disfrazan de ofertas por parte de supuestas empresas para aprender a invertir en activos digitales y llegar a mágicas ganancias rápidamente.
En ocasiones pasadas, se pudo ver el funcionamiento de este tipo de estructuras con los famosos telares de la abundancia o en la venta de la polémica maquinita facial, promocionada por muchas influencers y modelos argentinas. Lo llamativo era que la comercialización del producto no iba solo acompañada con la promesa de mejorar la piel, sino también con el discurso de convertir a las mujeres en exitosas emprendedoras y jefas de hogares.
Actualmente, con el auge del trading y los negocios digitales, los esquemas piramidales comenzaron a ocultarse detrás de las “academias de finanzas”, muy publicitadas en el último tiempo por gente que jura ganar cifras muy elevadas mensualmente. Las propuestas incluyen mensajes motivacionales que buscan atraer cada vez más público y reunir personas “con ganas de crecer”.
Pero, ¿qué tienen en común la venta de las máquinas para la cara, el telar de la abundancia y las academias de trading? A través de los años, este tipo de estafas fue mutando de acuerdo a la época, con distintas caras pero siempre con el mismo modo de funcionamiento. Dentro de estos esquemas, se simula que hay algún tipo de negocio real. Sin embargo, no importa qué producto o servicio se ofrezca, la verdadera ganancia se genera con el ingreso de cada vez más personas al sistema, dejando afuera o llevando a pérdida a los últimos que entran.
Frente a la reiterada aparición de estas ofertas fraudulentas, Filo.News habló con el economista y director de EpyCa Consultores, Martín Kalos, y con los responsables de la ONG Bitcoin Argentina, la organización encargada de llevar adelante la denuncia contra Generación Zoe, el conglomerado de firmas creado por Leonardo Cositorto, quien fue demandado en enero ante la Procuración General de la Nación (PROCELAC) por una "posible comisión de los delitos de estafa, captación de ahorro público no autorizado y manipulación del mercado".
El caso de Generación Zoe
En los últimos meses, la polémica estuvo centrada en Generación Zoe, una compañía de coaching y liderazgo fundada por Cositorto, una especie de gurú financiero que en su variada cartera de negocios presentó Zoe Capital, una empresa dedicada a la inversión a través de la cual se lanzó Zoe Cash, una criptomoneda que, según el grupo, estaría respaldada en gramos de oro extraído de minas de las provincias de Jujuy y San Juan.
La llamativa propuesta levantó sospechas en el mundo cripto, lo que derivó en una demanda a su creador. “Logramos reconocer ciertos elementos que, en líneas generales, presentan las estafas piramidales o esquemas Ponzi, como son la promesa y garantía de un retorno elevado en dólares, muy por encima de las tasas que ofrece el mercado y un intermediario que capta esos fondos, que es quién promete esa ganancia extraordinaria, sin contar con la autorización necesaria por las entidades gubernamentales correspondientes para hacerlo”, explicaron a Filo desde la ONG Bitcoin Argentina.
“Todos estos aspectos, que nosotros relevamos y que presentamos en la denuncia, establece la posible comisión de los delitos tipificados en los artículos 172, 309 y 310 del Código Penal de la Nación”, agregaron.
El supuesto respaldo de la criptomoneda con oro motivó a la organización a revisar la seriedad del proyecto. En este sentido, plantearon que lo más llamativo del activo de Generación Zoe es la posibilidad de cambiar, en un periodo corto de tiempo, una moneda de Zoe Cash que en enero se adquiría por 0,5 centavos de dólar, por un gramo de oro equivalente a 55 dólares. “Este supuesto respaldo se sostiene, al menos en términos del discurso de la empresa, a partir de la compra por parte de Generación ZOE de minas de oro en distintas provincias del país, hecho que ha sido desmentido por las autoridades”, informaron.
“Frente al riesgo de que esto derive en un perjuicio sobre el patrimonio de pequeños ahorristas, consideramos fundamental solicitar la intervención de la justicia para que investigue y determine si estamos o no ante un caso de estafa”, indicó la ONG.
¿Cómo funciona una estafa piramidal?
“Para cobrar la ganancia prometida, todo el tiempo tiene que estar entrando gente nueva al esquema, que a su vez, le pagan con el ingreso de más personas. Pero eso no puede durar para siempre porque a medida que se expande esa base, cada vez hay más gente a la que hay que pagarle, por lo tanto se necesitan más personas que ingresen. Ese es el límite de los esquemas ponzi o las estafas piramidales, donde al principio pagan, pero luego estallan y dejan sin cobrar a un montón de gente que puso dinero, esfuerzos y deseos”, explica Kalos.
El dinero deja de circular cuando las últimas personas que ingresaron no pueden conseguir más aportantes. “Ese es el momento en el cual la gente que ya aportó van a empezar a tener dilaciones en el pago, aparecen excusas, y lo que sucede es que no cobran o cobran solo una parte”, sostuvo el economista.
No todo lo que brilla es oro
Muchas veces, las estafas piramidales se ocultan detrás de mega eventos con reconocidos artistas y estrellas internacionales del deporte, autos lujosos y viajes a grandes ciudades del mundo. También, los “líderes” de los negocios aparecen en entrevistas periodísticas, publicidades y eventos benéficos, con un único objetivo de obtener cierta reputación y ganar legitimidad.
“Desde hace siglos que, con distintos nombres, estas estafas aparecen cada tanto, sobre todo en épocas de carencia materiales. Las complicaciones para llegar a fin de mes hacen que estos esquemas se vuelvan mucho más tentadores. Se difunden a través del boca en boca muchas veces, por parte de las primeras personas que los integran que son las que sí cobran”, agrega Kalos.
Una de las formas de camuflar este tipo de estafas piramidales es a través de discursos que se apropian de conceptos y enfoques, tal como sucedió con el telar de la abundancia, o como se sospecha que sucede con Generación Zoe, que habla de un empoderamiento de la juventud, frases motivacionales o que remiten a la superación personal. “Ese tipo de discursos, que toman del espíritu de la época, son también formas de disimular que lo que hay detrás es una estafa piramidal y que la meta no es empoderar a nadie, sino estafar y quedarse con la plata de otros”, detalló el economista.
Las estafas se reinventan
“Detrás de la novedad, el desconocimiento y el atractivo económico impulsado por el crecimiento del precio de varios criptoactivos, con Bitcoin a la cabeza, estos esquemas encontraron una forma de ponerse un nuevo disfraz para llevar adelante su actividad delictiva”, explican desde la ONG Bitcoin Argentina.
Según señalaron desde la organización, la pérdida de confianza dentro del mundo cripto “genera un daño muy grande tanto a las víctimas de las estafas, como a toda la industria capaz de dar enormes beneficios para el país”.
“En la ONG trabajamos para acompañar a individuos, sectores productivos y tomadores de decisiones para poder explorar las oportunidades de la tecnología blockchain, pero también trabajamos en la alerta y prevención de todo tipo de delitos que intente inmiscuirse dentro del ecosistema cripto porque afecta a su crecimiento y desarrollo”, añadieron.
La denuncia contra Generación Zoe fue recibida por PROCELAC, y hasta el momento, el fiscal federal Eduardo Taiano imputó a los responsables del holding y solicitó una serie de medidas de prueba ante el Juez Federal Ariel Lijo.
“Nuestra mayor preocupación se centra en que se tome conciencia y se lleven adelante las medidas necesarias para prevenir que nuevos ahorristas caigan en este tipo de estafas, y que quienes hayan depositado sus ahorros reciban asistencia y encuentren mecanismos para poder recuperar al menos parte de lo que se les debe”, concluyeron desde la ONG.
5 consejos para tratar de reconocer una estafa piramidal
Siempre hay que preguntar cuál es el negocio que hay detrás y averiguar qué autoridades lo regulan. También, consultar dónde está la validación profesional, matriculada y certificada de que ese negocio es lícito y tiene suficientes garantías para poder pagar.
Hay que sospechar cuando la ganancia es muy alta y se prometen cifras elevadas en muy poco tiempo. De acuerdo a Kalos, “cuando te ofrecen mucho más que en otro lado, se tiene que encender una señal de alarma de preguntarse por qué te pueden ofrecer tanto, y si es tan buen negocio, ¿por qué necesita mi dinero para llevarlo adelante?”.
Antes de aceptar, es necesario consultarle a alguien que sepa del tema y sea ajeno a la oferta. Por lo general, las personas que integran las estafas piramidales tratan de asegurarse que nadie sospeche, para que nunca llegue el momento de la denuncia.
Estas estafas pueden incluir la firma de contratos, la entrega de comprobantes legales o la insignia de un club al que la persona pertenece ahora, a modo de reconocimiento inicial, pero siempre es necesario preguntarse por qué no es un negocio que están haciendo otros, si es que esa propuesta puede pagar tanto más que el resto del mercado.
Frases como “¿Tenés ganas de crecer y querés generar un ingreso extra en dólares?” pueden funcionar como una alerta para saber que podría tratarse de una estafa piramidal. Es sospechoso que alguien quiera contar cuánto gana por mes y además, lo promocione e intente venderlo.