Los demócratas se anotaron este martes importantes victorias electorales, al ganar dos gobernaciones y la alcaldía de Nueva York. En todos los casos, los candidatos de centro-izquierda se impusieron por una clara ventaja a sus rivales republicanos.

En Nueva York, Zohran Mamdani, un candidato de izquierda de origen musulmán, obtuvo más de un millón de votos, equivalentes al 50% de los sufragios. Con casi 200.000 votos menos, el independiente Andrew Cuomo -respaldado por Donald Trump- superaba por poco el 40%.

Con una plataforma claramente socialista, Mamdani ganó prometiendo reducir el costo de vida e imponer impuestos a las grandes fortunas.

En una contienda que marca el pulso tras el primer año de gestión de Trump, los demócratas presentan los resultados como una expresión del descontento de la ciudadanía con el segundo mandato del magnate.

"Si alguien puede mostrar a una nación traicionada por Donald Trump cómo derrotarlo, es la ciudad que lo vio nacer. En este momento de oscuridad política, Nueva York será la luz", dijo Mamdani tras conocerse su victoria.

El republicano, por su parte, intentó justificar el revés electoral: "'Trump no estaba en la boleta y el cierre del gobierno fueron las dos razones por las que los republicanos perdieron las elecciones esta noche', según encuestadores".

Además de haber retenido la alcaldía de la ciudad más poblada de Estados Unidos, los demócratas también se anotaron un triunfo en las elecciones a gobernador de dos estados, en una elección que sirve de parámetro del humor social de los norteamericanos.

En Virginia, la demócrata Abigail Spanberger, exagente de la CIA, fue elegida como la primera mujer gobernadora del estado, recuperando el control que los republicanos mantenían desde hace cuatro años.

En tanto que en Nueva Jersey, la congresista demócrata Mikie Sherrill, expiloto de la Marina, derrotó al empresario republicano y aliado de Trump Jack Ciattarelli.