El presidente Javier Milei partirá este jueves a las 22 a Roma para asistir el sábado al funeral del Papa Francisco, fallecido este lunes a los 88 años.
El mandatario encabezará la delegación argentina, que estará integrada por el jefe de Gabinete Guillermo Francos y los ministros Sandra Pettovello (Capital Humano); Patricia Bullrich (Seguridad) y Gerardo Werthein (Relaciones Exteriores). También volarán a Italia el vocero presidencial Manuel Adorni y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei.
Hoy, por otra parte, el secretario de Culto y Civilización, Nahuel Sotelo, viajrá a la Ciudad del Vaticano para ultimar los preparativos para recibir a la comitiva local.
La despedida de Francisco, quien murió este lunes a los 88 años en su residencia de la Casa Santa Marta, reunirá a líderes y jefes de Estado de todo el mundo. Confirmaron su asistencia, por mencionar algunos nombres, los presidentes Donald Trump (EE.UU.) y Volodimir Zelensky (Ucrania); y los primeros ministros de Francia e Italia, Emmanuel Macron y Giorgia Meloni.
Milei expresó su intención de viajar este mismo lunes, cuando suspendió su agenda y comenzó los preparativos para ir al Vaticano.
El funeral del Sumo Pontífice será este sábado en la Plaza San Pedro. La Santa Sede informó que a las 10 de la mañana del primer día del Novendiali, se celebrará la Misa exequial del Sumo Pontífice en el atrio de la Basílica, según el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis. La liturgia exequial será presidida por el Cardenal Decano Re.
Las últimas horas de Francisco
Este martes, el Vaticano reconstruyó las últimas horas del Papa. Según publicó en el sitio VaticanNews, Francisco estaba preocupado por la que sería su última recorrida por la Plaza San Pedro.
"¿Creés que podrés hacerlo?", le preguntó a Massimiliano Strappetti, el enfermero que -en sus propias palabras- le salvó la vida y quien, tras ese episodio, se convirtió en su asistente personal de salud. Su asistente lo animó a salir.
En el domingo de Pascua, tras pronunciar el 'Urbi et Orbi', y después de semanas internado por sus graves problemas de salud, Francisco volvió a acercarse a los miles de fieles que esa mañana escucharon su bendición. "Gracias por traerme de vuelta a la Plaza", le dijo el Sumo Pontífice a Strappetti. Sin saberlo, Francisco se encontraba por última vez cara a cara con las miles de personas que en incontables ocasiones se reunieron para escucharlo.
Por la tarde del domingo, Francisco descansó y cenó "tranquilamente". El panorama se complicó hacia las 5.30 de la madrugada del lunes. En ese momento, cuenta el Vaticano, aparecieron los primeros síntomas de malestar. Rápidamente, intervinieron sus principales asistentes. "Más de una hora después, tras saludar a Strappetti, tumbado en la cama de su piso en la segunda planta de la Casa Santa Marta, el Pontífice entró en coma. No sufrió, todo sucedió rápidamente", añadió la Santa Sede.
"Una muerte discreta, casi repentina, sin largas esperas ni demasiado clamor para un Papa que siempre había mantenido su salud en gran secreto. Una muerte que se produjo al día siguiente de la Pascua, al día siguiente de haber bendecido a la ciudad y al mundo, al día siguiente de haber abrazado de nuevo, después de mucho tiempo, al pueblo. Aquel al que, desde los primeros momentos de su elección, el 13 de marzo del 2013, había prometido un camino juntos", completó la reconstrucción de las últimas horas de quien en Argentina fuera Jorge Bergoglio.