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El Papa Francisco apuntó contra la represión del Gobierno: "En vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta"

En su exposición en el 10° aniversario del Primer Encuentro Mundial de Movimientos Populares, el Sumo Pontífice denunció también un presunto caso de corrupción del Gobierno, aunque evitó precisar si fue esta administración o la previa.

El Papa Francisco apuntó contra la represión del Gobierno: "En vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta"

El Papa Francisco cuestionó al Gobierno de Javier Milei por la represión en la movilización en contra del veto a la ley de movilidad jubilatoria y, por el contrario, defendió el valor de la “justicia social” en el 10° aniversario del Primer Encuentro Mundial de Movimientos Populares. A causa del operativo antipiquetes de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, manifestantes y una niña resultaron heridos por la utilización de gas pimienta en medio de la represión. 

“Me hicieron ver un filmado de una represión de hace una semana, menos quizás. Obreros, gente que pedía por sus derechos en la calle y la Policía la rechazaba con una cosa que es lo más caro que hay, ese gas pimienta de primera calidad. No tenían derecho a reclamar lo suyo porque eran revoltosos, comunistas... y el Gobierno se puso firme: en vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta. Les convenía. Ténganlo en cuenta”, apuntó el Sumo Pontífice.

Del encuentro participaron representantes de movimientos sociales de la Argentina, entre ellos Juan Grabois y el titular de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Alejandro “Peluca” Gramajo.

Previamente, el Papa había analizado la situación: ”El silencio frente a la injusticia abre paso a la división social, y la división social abre paso a la violencia verbal, y la violencia verbal a la violencia física, y la violencia física a la guerra de todos contra todos. Ahí está la cola del diablo”.

Para el Sumo Pontífice, la actitud del Gobierno es "altanera, que es lo contrario de la compasión", además, advirtió que "mirar con desprecio, con odio” lo que desencadena hechos de violencia como los que ocurrieron con las protestas recientes. 

“Mirar desde lejos, mirar desde arriba, mirar con indiferencia, mirar con desprecio, mirar con odio. Así se gesta la violencia y el silencio de la indiferencia que habilita el rugido del otro”, subrayó Francisco.

El Papa Francisco contrapuso la justicia social y la cultura del ganador 

El Papa criticó la "cultura del ganador", que justifica la acumulación de riqueza en manos de unos pocos a costa de la explotación de muchos, y promovió la compasión como un valor central para alcanzar la verdadera justicia social.

"La Justicia Social es inseparable de la compasión. La compasión significa padecer con el otro, compartir sus sentimientos. La verdadera compasión construye la unidad de los pueblos y la belleza del mundo", reflexionó el Sumo Pontífice, que contrapuso esa directriz peronista a la "meritocracia" y "cultura del ganador" como una ideología que favorece a quienes ya tienen privilegios.

"Las ideologías deshumanizadas promueven la 'cultura del ganador', que es un aspecto de la 'cultura del descarte'. Algunos llaman a esto 'meritocracia', otros no la nombran pero la practican. Es gente que, parada sobre ciertos éxitos mundanos, se siente con el derecho de despreciar a los 'perdedores'.  Así se gesta la violencia: el silencio de la indiferencia habilita el rugido del odio", añadió Francisco.

El Papa resaltó la importancia de los movimientos sociales y la iglesia para frenar la criminalidad en los barrios populares

Francisco enfatizó en la importancia de los movimientos sociales y la iglesia en los barrios populares para frenar la criminalidad organizada en los barrios populares. "El narcotráfico, la prostitución infantil, la trata de personas, la violencia brutal en los barrios y todas las formas de criminalidad organizada crecen sobre la tierra arada por la miseria y la exclusión que en definitiva son su condición de posibilidad", apuntó. 

Además, encomendó a los movimientos sociales enfrentar al crimen organizado en los barrios de forma indirecta. "Sé que ustedes no son policías, sé que ustedes no pueden enfrentar directamente a las bandas criminales, pero les pido, por favor, que las enfrenten de manera indirecta: el trabajo de base que realizan ustedes y tantas personas de la iglesia es muchas veces la última barrera de contención. Sigan combatiendo la economía criminal con la economía popular. No aflojen, por favor".

"El crimen organizado crece cuando no hay integración sociourbana y se dejan marginados los barrios de los pobres sin agua, cloacas, luz, calefacción, veredas, parques, centros comunitarios, clubes, parroquias. Crecen cuando en los territorios rurales no hay una adecuada distribución de la tierra, un ordenamiento territorial equilibrado, un apoyo constante a la agricultura familiar y el respeto a la familia rural que termina sometida a poderes criminales. Hay que atacar esas causas estructurales, pero mientras tanto tenemos que enfrentar esto. Las dos cosas al mismo tiempo", aseguró el Papa.

El Papa denunció un presunto caso de corrupción del Gobierno, aunque evitó precisar si fue la administación de Milei o de Fernández

"Mi abuela nos repetía siempre, estén atentos, que el diablo entra por los bolsillos. Siempre. Que una coima aquí, una cosa allá...”, arrancó el Papa con la anécdota, que cerraría con una denuncia de corrupción. 

“Me contaba un emprendedor internacional, que estaba haciendo en Argentina unas inversiones de extensión de eso que ellos estaban llevando adelante, que trabajan muy bien y fue un acuerdo. Fue a presentar al ministro un nuevo plan de nuevas extensiones, el ministro lo atendió muy bien y dijo 'dejemeló, ya lo van a llamar...'. Al día siguiente, el secretario del ministro lo llamó, le dijo: 'puede pasar en dos días, así le entregamos el permiso’. Pasó, le entregó los papeles y la firma...y cuando él (el emprendedor) se estaba por levantar, le dijo: ¿y para nosotros, cuánto?... ¿Y para nosotros, cuánto? La coima. El diablo entra por el bolsillo, no se olviden”, expresó Francisco.

A pesar de ello, el Sumo Pontífice evitó precisar si el echo fue durante la administación de Javier Milei o de Alberto Fernández.