Las crisis en el bloque de diputados de La Libertad Avanza están llegando cada vez más lejos, a tal punto que se abrió una grieta entre quienes reclaman la inmediata expulsión de Lourdes Arrieta y Rocío Bonacci, y los que son proclives a la "contención" de las diputadas.

Todo comenzó tras el escándalo por la visita a represores en Ezeiza. Sin embargo, ante esta situación, la última palabra la tienen el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y el titular del bloque libertario, Gabriel Bornoroni.

De acuerdo a NA, se "estaba evaluando" la expulsión (o permanencia) de Arrieta en medio de esta crisis sin precedentes.

Bajo ese marco, la última información es que Arrieta está con un pie afuera, y podría haber un efecto en cadena que podría llevarse puestas a Bonacci y a Marcela Pagano. Esta última también está en conflicto con el ala más dura del bloque.

A su vez, lo que terminó de implosionar al bloque fue el señalamiento a la vista de todos que hizo Arrieta de la supuesta responsabilidad del propio Menem, por haber autorizado -según su versión- el traslado en vehículo de la comitiva libertaria hacia el pabellón de los represores.