La Cancillería rechazó la resolución emitida por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, que confirmó los resultados electorales que declararon ganador al presidente Nicolás Maduro. La postura argentina fue expresada en un comunicado conjunto con otros países de la región, Centroamérica y Estados Unidos.

Esto se debe a que la Corte venezolana ratificó el informe del Consejo Nacional Electoral (CNE), a pesar de que la comunidad internacional ha cuestionado fuertemente el escrutinio. "Nuestros países ya habían manifestado el desconocimiento de la validez de la declaración del CNE, luego de que se impidió acceso a los representantes de la oposición al conteo oficial, la no publicación de las actas y la posterior negativa a realizar una auditoría imparcial e independiente de todas ellas", señala el comunicado.

El documento también menciona el informe de la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos sobre Venezuela, que alertó sobre la falta de independencia e imparcialidad tanto del CNE como del TSJ. En este sentido, los países firmantes reiteraron que "solo una auditoría imparcial e independiente de los votos, que evalúe todas las actas, permitirá garantizar el respeto a la voluntad popular soberana y la democracia en Venezuela".

Además, el comunicado subraya que los firmantes continuarán insistiendo en el respeto a la expresión soberana del pueblo venezolano, que se manifestó el 28 de julio. Finalmente, el texto expresa "preocupación y rechazo por las violaciones a los Derechos Humanos perpetradas contra los ciudadanos" en las movilizaciones contra el gobierno de Maduro.

En un gesto de agradecimiento, los líderes opositores venezolanos, Edmundo González Urrutia, quien compitió contra Maduro, y María Corina Machado, destacaron el apoyo brindado por la canciller argentina, Diana Mondino.