El presidente de España, Pedro Sánchez, volvió a cruzar a su par argentino, Javier Milei, en medio del conflicto diplomático entre ambos países, y cuestionó el uso de los recursos públicos españoles por parte del mandatario argentino durante su estadía en Madrid, donde presentó su último libro y participó de una cumbre de VOX.

Al analizar la crisis internacional durante una exposición ante el Congreso de los Diputados, el Jefe del Gobierno español señaló: "Hablan de la retirada de una embajadora. Es una práctica de las relaciones diplomáticas como acto de protesta formal. Da la sensación de que aquí nunca se ha retirado a un embajador de una capital extranjera. Hay distintos antecedentes, como cuando (el ex presidente Mariano) Rajoy retiró al embajador en Damasco -Siria-, medida que se mantiene hasta hoy".

"Nuestra protesta formal va ligada a la proporcionalidad, en este sentido, al ataque desde la capital del país anfitrión, Madrid, contra la instituciones públicas españolas hechas por Milei después de haber medios del estado español que hemos puesto a su disposición, como el aeropuerto de Trorrejón, la seguridad pública, cuando sabemos que era un viaje privado", explicó. "No tiene precedentes en la historia reciente ni cabida en las prcáitcas democráticas entre gobiernos", afirmó.

Aun en este contexto de tensión, Sánchez garantizó que las relaciones económicas con Argentina "van a ser una prioridad" para el Gobierno español.

"Nuestros sentimientos fraternales hacia el pueblo argentino, especialmente a aquellos que conviven con nosotros, o la protección a todo lo que tiene que ver con las relaciones económicas, culturales con Argentina, va a ser siempre una prioridad para nuestro Gobierno, lo ha sido desde el pirmer minuto", dijo. Y reiteró: "Entre gobiernos los afectos son libres, evidentemente este gobierno nada tiene que ver con el gobierno de Milei en Argentina, pero el respeto es irrenunciable, por encima de las ideologías, están la educación y el patriotismo".

La crisis diplomática escaló a niveles inéditos después de que el Gobierno español retirara definitivamente a su embajadora en Buenos Aires, María Jesús Alonso, tras la negativa de Javier Milei a disculparse con Sánchez por llamar corrupta a su esposa y tildar de "cobarde" a su par español. "Milei, lejos de rectificar, se ratifica en el insulto y el ataque", apuntó Sánchez.