La decisión de la ex fórmula presidencial de Juntos por el Cambio de apoyar la candidatura de Javier Milei, de La Libertad Avanza, para enfrentar a Sergio Massa (Unión por la Patria) en el balotaje del próximo 19 de noviembre, provocó un quiebre en la frágil unidad que abroquelaba a la alianza opositora tras la derrota en las elecciones generales del domingo pasado.

"Nos perdonamos mutuamente, hoy la patria necesita que seamos capaces de perdonarnos porque está en juego algo muy importante para el futuro", justificó su decisión Bullrich, acompañada en conferencia de prensa por quien fuera su candidato a vicepresidente, Luis Petri, y consensuada con Mauricio Macri en una reunión la medianoche del martes en la casa del ex presidente.

Su respaldo al economista provocó un cimbronazo político en JxC. Es que los principales referentes de las distintas terminales de la coalición apuntaban en la previa de esta decisión a discutir, primero en reuniones partidarias y luego en la Mesa Nacional, la posición que adoptaría el frente, y advertían que cualquier manifestación unilateral podía derivar en una fractura.

Rodríguez Larreta, la Coalición Cívica, el radicalismo y los gobernadores se despegan del macrismo

El malestar por la decisión comenzó en el PRO. Es que ese espacio tenía previsto reunirse el martes para discutir los pasos a seguir. Aquella reunión fue aplazada hasta el miércoles, pero durante la mañana de ayer volvió a suspenderse. Para entonces, Bullrich y Macri ya se habían encontrado con Milei. Improvisaron un encuentro ayer por la mañana en la casa de Bullrich en Palermo, pero el acuerdo ya era un hecho. Cada uno por su lado, los dirigentes se retiraron de aquel cónclave casi sin hacer declaraciones a la prensa.

"No sabía nada, fue una reunión a medianoche, en secreto. Me desayuné con mucha sorpresa sobre esa reunión. No se qué hablaron, qué acordaron, no sé nada", dijo en conferencia de prensa el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, tras anunciar su neutralidad. Sus palabras revelaron lo que piensan quienes miran con recelo el acuerdo: que el pacto entre Macri, Bullrich y Milei va más allá de su afán por vencer al oficialismo y que esconde una serie de condiciones que dicen desconocer, pero que estarían relacionadas con el rol del macrismo en una eventual administración del libertario.

"Capaz habrán hecho un nuevo frente. No sé que habrán hablado anoche. Se ve que acordaron muchas cosas, lo que me suena raro", abonó aquella teoría el presidente del radicalismo, Gerardo Morales, al anunciar la postura que definió el partido: "La UCR no apoyará a ninguno de los dos candidatos. Ninguno de los dos garantiza un futuro de progreso para la Argentina". Antes, la Coalición Cívica de Elisa Carrió llamó a anular el voto.

No sólo los moderados, catalogados como 'palomas' dentro de la interna de JxC, tomaron distancia de Macri y Bullrich, quienes, al menos para el radicalismo, están fuera de la coalición.

Durante la tarde de ayer, en la Casa de Corrientes, en la Ciudad de Buenos Aires el gobernador de Corrientes Gustavo Valdés ofició de anfitrión de un encuentro en el que los gobernadores electos y en ejercicio de Juntos por el Cambio buscaron resolvieron correrse de la discusión por la segunda vuelta.

“Más allá de nuestras posiciones personales, nuestro deber en este momento no es determinar quién será el próximo presidente”, dijeron en un extenso comunicado en el que apuntaron tanto a Massa como a Milei.

"Seguiremos siendo la principal resistencia al populismo económico que nos puso de rodillas frente al flagelo de la inflación, hija de un Gobierno fiscalmente irresponsable", dijeron sobre el actual oficialismo. "Pero la forma de hacerlo -señalaron- es reafirmando los valores fundacionales de Juntos por el Cambio en el Congreso Nacional y las provincias, y no entregando nuestra identidad al alquimista de turno".

Incluso Jorge Macri, quien no asistió al encuentro, se diferenció de su primo. En pos de sostener la unidad, dijo que su intención es "no agregar más nafta al fuego" y prefirió no pronunciarse aún: "No voy a decir ahora por quién voto".