Así como su personaje, la que llegó a la serie, fue Majo Cabrera. "Soy una privilegiada. Nadie realmente puede imaginarse que puede empezar así una carrera, de la mano de estos monstruos, ¿verdad?  y me pasó a mí", expresa y con su sonrisa pareciera saborear sus recuerdos hoy presentes.

Estrenar una serie es de alguna manera ese volver a vivir la selección, la grabación. En un mundo cada vez más voraz, donde todo tiene que digerirse rápidamente para pasar a otra cosa, y así seguir, "Nada", la nueva serie de la dupla de directores Mariano Cohn y Gastón Duprat ("El ciudadano ilustre", "4x4", "Competencia oficial", "El Encargado") se construye con esa lógica, parte de episodios cortos (de alrededor de 30 minutos), entretenidos, que "se miran rápido", pero genera una emocionalidad que permanece con quien mira, aunque ya se haya alejado de la pantalla donde la está mirando. Quedan las ganas de darse un buen paseo, comerse un pancho en un buen puesto del barrio, ver a un amigo, y saber quiénes te dicen la verdad.

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"Toda la historia se armó en base a 'Beto' (Luis Brandoni), su relación con Robert De Niro. Él fue el puntapié aunque después se les hayan agregado otros ingredientes. La que llegó fui yo", coincide, mientras charla con Filo.news en uno de los puntos porteños que a su vez fue locación en la serie: el complejo gastronómico La Fernetería del Museo Nacional Bellas Artes.

"Asumir eso era difícil, porque era como 'Espera, ¿es un sueño?', y no, era real. Llegar acá fue encontrarme con un Beto Brandoni que era la persona con la que yo tenía ganas de actuar. Unas semanas antes me preguntaban con qué actor argentino quisiera trabajar si tenía la posibilidad, y yo no dudé en decir con Luis Brandoni, y que a la semana se cumpliera, cuando me llamaron y dijeron 'Estás en la serie' y que era él el protagonista, de ahí fue todo un sueño que en realidad no podía vivir como tal porque tenía que estar con los pies en la tierra todo el tiempo", expresa, simpática.

Si bien toma "Nada" como una gran carta de presentación a la actuación, la serie no fue la primera producción que Majo filmó en Argentina. En 2019, estrenó la película “Gracias Gauchito”, con Diego Cremonesi, sobre el mito del santo popular. Mientras que dos años después, participa en la serie española "Sin límites" (para Prime Video), otro título con anclaje histórico que se remonta al siglo XVI, con los viajes de Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano.

"El bocado del corazón"

A lo largo de los cinco episodios -titulados con ingeniosos dichos populares relacionados a la comida- de la serie que ya se encuentra para maratonear en Star+, Majo Cabrera interpreta a Antonia, una joven que viajó de un pueblo de Paraguay a Buenos Aires, para conseguir un trabajo que le permita enviar dinero para su abuela y una hija pequeña que dejó a su cuidado. La actriz impregna los episodios de un carisma que como a la historia la llenan de frescura y de ternura. 

"El carácter porteño es famoso en todas partes del mundo. Estoy en proceso de adaptarme al acento. Vine a probar el bocado porteño de la mano de los mejores", Majo Cabrera.

"Beto me ayudó muchísimo", asegura trazando otro paralelismo con la realidad que rompe la cuarta pared de la serie, recurso con el que el guión (realizado por los directores, en conjunto con Emanuel Diez) coquetea constantemente. "Los directores estuvieron digitando todo pero a nivel interpretativo, cada entrada al set de Beto era una clase magistral suya", lo ensalza Majo.

En la ficción, Brandoni interpreta al grandilocuente y pedante crítico gastronómico Manuel Tamayo Prats, a quien de los días de pluma en los medios, le queda sólo la fama para echarse a descansar, algunas deudas y la entrega de un libro que procrastina entregar pese a que ya cobró el adelanto de la editorial. A su vida llega Antonia, quien le insiste trabajar para él, pero al revés del imaginario colectivo, la joven aunque cuenta con ánimos de perseverancia, desconoce de manias para las tareas domésticas. Pero ese no es el único prejuicio que desterrará. 

Detrás del cliché de que tanto Brandoni como Tamayo Prats le van marcando saberes del oficio, Cabrera y Antonia les transmiten con sutileza y firmeza, un aprendizaje que tiene otra esencia.

"La primera escena que compartimos con Beto tuve que fingir que no estaba temblando", se ríe, mientras recuerda. "Cuando ella le lleva la sopa y él le dice 'es el wogh' («el bocado del corazón»). En esa fue la primera escena; tuve que romper el hielo y en realidad por dentro estaba temblando pero justamente enseguida disipó todo nerviosismo, porque me dio la confianza de la complicidad. En todo momento me estaba diciendo algo más, me estaba acomodando en un espacio de trabajo seguro donde yo podía proponer y tanto él como los directores, aceptar. Me dejaron sentirme en un lugar donde todos estaban dispuestos a escucharme de la manera en que lo escuchaban a él", menciona.

"Después de eso me dicen 'va a estar Robert de Niro', además", señala. "Tenía que comportarme como profesional", manifiesta como tomando una postura recta, que en segundos se desarticula con una risa.

Desde "Nada", Majo comparte algo con De Niro además del set. La particularidad de grabar por primera vez una serie argentina, que en el caso del ganador del Oscar (por "El Padrino II" y "Toro Salvaje"), se trató de la única que decidió hacer. 

La ficción, cuenta con las actuaciones de un elenco coral, recurrente en otras producciones de Cohn y Duprat -lo que a la vez permite trazar universos comunes y cercanos del costumbrismo que pintan, como el cuadro del edificio que es a su vez el símbolo de la serie, y remonta los primeros pasos profesionales de los cineastas en el arte y obras de videoarte- como Guillermo Francella (que así como Brandoni aparece en "El Encargado", él prometió realizar una participación en uno de sus episodios), Silvia Kutika, Gastón Cocchiarale, María Rosa Fugazot, Enrique Piñeyro, Daniel Miglioranza, Pablo Novak, Belén Chavanne, Alejandro Paker, Rodrigo Noya, Ariadna Asturzzi, Cecilia Dopazo, Manuel Vicente y con la participación especial de Daniel Aráoz (junto a quien vuelve a compartir escena y "rivalidad" tras "La odisea de los giles").

Y cuando la serie parecía radicada en Buenos Aires, y que no podía contarse en otra parte del mundo -porque es parte de la arrogancia porteña, y también porqué no de su cariño- extiende sus raíces en Paraguay, en esa intercultura latina que por supuesto es muy baires. Erradica que los saberes provienen de las urbes con el encanto de los platos como el el vorí vorí, el jukysy, el pirá caldo que -como también le sucede al Anton Ego de "Ratatoullie"- remontan a las fibras más íntimas y da como frutilla del postre la posibilidad de abrirse un restaurante en el pueblo de Antonia.

* ¿Cómo fue para vos grabar acá y cómo te llevás con la cultura argentina?

En general con la cultura del mate y la comida estamos muy al tanto en Paraguay. El carácter porteño es famoso en todas partes del mundo y por eso creo que va a caer muy bien la serie porque es justamente el reflejo de ese espíritu.

Nosotros los paraguayos somos más tranquis en ese sentido. Para mí la experiencia fue venir a entrenarme y aprender ese carácter de los mejores. Todos saben quiénes son realmente los porteños.

* ¿Quiénes son realmente los porteños?  

Los porteños son ese carácter que mezcla a los italianos, los descendientes europeos, el tango, el lunfardo. Yo aprendí de los mejores, y me caen muy bien. Hoy por hoy me voy a la pizzería y me pido 'de dorapa'.

Estoy en el proceso de adaptarme en la cuestión de acento, por si surge un personaje de acá. Cada vez estoy más de acá. Vine a probar el bocado porteño de la mano de los porteños.

* Es difícil imaginar qué puede seguir pero ¿qué otros proyectos te gustarían hacer?

A mí me gustaría muchísimo salir a trabajar. Siempre pensé que podía venir a la Argentina y una vez que estoy acá siento que también es posible ir a otras partes. Me encantaría hacer películas en inglés, hacer películas en España. Se me abre un mundo que quiero devorar.

Majo Cabrera realiza su debut en una serie argentina con "Nada" (lista para ver en Star+), de Mariano Cohn y Gastón Duprat, luego de viajar a España donde acompañó y presentó su estreno internacional en la 71° edición del Festival de Cine de San Sebastián, disfruta su llegada al streaming para todo público.