Mientras que en LAM debatían sobre el romance entre Guillermina Valdés y Santiago Maratea, Yanina Latorre recordó cómo fueron sus comienzos de amistad con el influencer y admitió que durante la cuarentena rompió las reglas que imponía el gobierno.
Tras narrar que en un principio se odiaban y hoy son grandes amigos, contó una infidencia que enojó a parte del plantel de LAM. Sin medir lo que podía generar, Latorre reveló que tras cuatro meses de hacer vivos por instagram, un día, en pleno confinamiento metió a Santi Maratea, Lizardo Ponce y Martín Cirio en su camioneta escondidos y se los llevó a su casa para comer un asado familiar.
"Vinieron los tres a comer a casa, digo toda la verdad, aunque me hagan multas, me cancelen, en cuarentena. Los tapé de campera y al de seguridad que te quería revisar el baùl le dije: "¡Wait con acercarse al auto! ¡A mí no me revisa nadie!" y los metí", dijo mientras se reía.
Y continuó: "Asado, tapamos todas las ventanas porque encima era la època de los vivos, si los vecinos los veían... y hablabamos bajo", remarcó. "El quincho de casa, hicimos un asadito, nos morimos de la risa", continuó mientras que Andrea Taboada la interrumpió y le dijo: "Cometiste un delito".
Pero Yanina desafiante expresó: "Si, ¿vos nunca cometiste una contravención? ", manifestó indignada con el planteo y continuó con la anécdota. Ante la verborrágica anécdota, Ángel de Brito hizo un stop y le preguntó a Marcela Feudale qué le pasaba con esto que contaba Yanina, ya que notó que la periodista estaba molesta: "No, estoy pensando cuántos boludos nos quedamos encerrados y cuántos estaban derivando por ahí, ¿no?", comentó la locutora.
Y siguió: "Mientras nosotros pensábamos en cómo seguir viviendo, es una pena. Duele" lanzó mirándola a Yanina que minimizó la situación. No obstante, Feudale cerró: "No importa, cada uno sabe cómo regula su vida", sentenció con pesar Marcela.