"Mi primer hilo de Twitter va a ser sobre cómo me quisieron robar cagándome a palos y diciéndome 'trolo de mierda esta vez te salvaste, pero a los putos hay que matarlos a todos'"; con ese mensaje, Imanol Salvo relató un caso de homofobia que vivió en primera persona.
El periodista de Chequeado, VICE y Reverso, contó que fue agredido por un grupo de personas el domingo a la madrugada cuando volvía del Club Cultural Matienzo. "Me cagaron a palos para robarme mis cosas, claro. Y también porque soy puto y se me nota", expresa.
"Soy yo el que escuchó cómo un varón violento y heterosexual gritaba una y otra vez 'trolo de mierda esta vez ganaste, pero a los putos hay que matarlos a todos' -mientras yo corría con la cara llena de sangre-, me doy cuenta que es importante hacer público esto", continuó.
El periodista resaltó la importancia de denunciar este tipo de actos de odio: "Hace siete años que vivo en Buenos Aires y nunca me pasó nada, esta es la primera vez. Jamás sentí que mi propia identidad podía generar esto, es decir, que ser quién soy sea motivo para que un tercero me agreda, me golpee y me humille. Evidentemente estaba equivocado".
A su vez, reflexionó sobre la violencia que nos rodea como sociedad, la cual crece día a día al mismo nivel que el "individualismo", egoísmo y falta de empatía con el otro: "Mientras caminaba lastimado y sangrando nadie quiso ayudarme, ni siquiera un policía al que le hice señas para que me se me acerque. Tampoco me ayudaron dos maricas que pasaron de la mano adelante mío mientras yo me limpiaba la cara con mi buzo".
"Las marcas que tengo en mi cara son las marcas de la desigualdad. Las personas no somos todas iguales, no todas tenemos las mismas oportunidades, no accedemos a los mismos beneficios, ni tampoco estamos expuestas a las mismas violencias", afirmó.
"Las marcas que tengo en mi cara son las marcas de la desigualdad", confesó.
Finalmente, aseguró que denunció realizar el hilo de Twitter para destacar la importancia de hablar de estos temas, hacer público los riesgos a los que enfrentan las personas que pertenecen a "una minoría y aquellas que históricamente fueron violentadas".
"Aunque sea engorroso hay que denunciar, hay que buscar a los agresores y hay que hablar de esto. Todos y todas tenemos que tirar para el mismo lado y hacer lo que esté a nuestro alcance para vivir en un lugar más justo y más inclusivo", señaló.