Esta semana Electronic Arts le prohibió el acceso de por vida a un jugador de FIFA, en medio de una causa judicial por los mensajes racistas que le envió al ex jugador del Arsenal, Ian Wright.
El caso se remonta a mayo de 2020, cuando Patrick O’Brien, un joven irlandés de 18 años, perdió un partido del modo Ultimate Team con un equipo del que formaba parte la leyenda Ian Wright, en una carta de Ícono.
Después de la derrota el pibe no tuvo mejor idea que entrar en Instagram y enviarle 20 mensajes racistas al jugador, quien por supuesto no entendía que estaba pasando pero no dudó en elevar la situación a una causa civil.
O’Brien se declaró culpable y se disculpó, por lo que el juez decidió no condenarlo alegando que no habría beneficio en una condena legal, y que el joven había mostrado arrepentimiento genuino y donado 500 Europa a la Red Irlandesa Contra el Racismo.
Eso no fue suficiente para el ex jugador, que emitió un comunicado diciendo que estaba “decepcionado” por el fallo, y que el caso “no tenía que ver con venganza”, sino “acerca de las consecuencias de los actos racistas”.
“Viendo esta sentencia sólo puedo imaginar qué consecuencias hay para cualquier persona que cometa este tipo de vil acto racista,” escribió Wright.
“Una persona me deseó la muerte por mi color de piel. Ningún alegato de ‘ingenuidad’ o ‘inmadurez’ por parte de un juego será aceptable nunca para nosotros. La supuesta inmadurez e ingenuidad de nuestros atacantes nunca nos ofrece consuelo”.
Luego de conocido el fallo, Electronic Arts emitió un comunicado en el que informaba del veto de O’Brien, y había eliminado sus cuentas de FIFA permanentemente.
“Ian Wright es parte de la familia de EA Sports”, escribió el vicepresidente de marca de EA Sports FIFA, David Jackson.
"Valoramos enormemente su apoyo, y también queremos que sepa que cuenta con el nuestro. El año pasado, Ian fue objeto de un terrible ataque racista por parte de un jugador que perdió un partido de FIFA 20. Este comportamiento es inaceptable en todos los niveles y no lo toleraremos. Nuestra Carta de Juego Positivo guía nuestras acciones en una situación como esta, y hemos tomado la acción para prohibir permanentemente al jugador jugar o acceder a nuestros juegos.
El racismo debe terminar. Nosotros estamos comprometidos a continuar nuestro trabajo de manera positiva, a través de acciones que harán que nuestras comunidades sean divertidas, justas y seguras para todos".
Actualmente la empresa está llevando a cabo una campaña junto a la Premier League titulada No Room for Racism (Sin Lugar para el Racismo), después que varios jugadores del Manchester United fueran atacados en las redes sociales.