Hace más de treinta años, los vecinos ignoraban lo que sucedía en una de las habitaciones de una casa acomodada del barrio de San Isidro. Los gritos se tapaban con música, y una puerta dividía la rutina de la familia Puccio de los horrores que allí cometían.

Bajo el comando de Arquímedes Puccio, padre de familia y jefe del clan, se llevaron a cabo varios secuestros extorsivos, en los que contó con la complicidad policial y la colaboración de sus hijos Alejandro y Daniel "Maguila" Puccio.

Daniel "Maguila" Puccio es el hijo mayor de la familia. Si bien estuvo involucrado en los hechos, no fue condenado por la Justicia, a diferencia de su padre y su hermano. Permaneció detenido entre 1985 y 1988, quedó en libertad y desapareció de la mira judicial.

Maguila estuvo absuelto y gozando de su libertad hasta las últimas horas, cuando fue detenido en un operativo antidrogas en Brasil con documento falso. Los oficiales notaron que la foto no coincidía con su rostro por lo que fue trasladado a la comisaría, lo multaron y le dieron un plazo de dos meses para regular su situación en Brasil.

El caso del Clan Puccio fue relatado en el libro periodístico de Rodolfo Palacios El clan Puccio: la historia definitiva (2015). El mismo año, se lanzó una película y una serie. Mientras que la serie contó con la producción de Sebastián Ortega y fue protagonizada por Alejandro Awada y el Chino Darín, el film fue dirigido por Pablo Trapero con un elenco principal encabezado por Guillermo Francella y Peter Lanzani.  

En la película, Gastón Cocchiarale es Maguila. Hoy, a cuatro años del estreno -y cinco del casting- el actor revisa la detención de quien fue su personaje. Sabe que lo detuvieron en Brasil por la portación de documentos falsos. Se reserva, por respeto y consideración a las familias de las víctimas, hablar y opinar sobre el hecho puntualmente.

"Prefiero no dar declaraciones imprudentes de una causa que desconozco cuál es su estado actual pero sí deseo que se haga justicia", sostiene el joven actor en diálogo con Filo.News. 

Gastón Cocchiarale, el muchacho que ingresó al casting a sus 21 años sin experiencia en cine, admirando profundamente a Guillermo Francella y con ansias de crecer en su profesión fue elegido para el papel que marcaría -como él mismo menciona- "un antes y un después en su vida".

• ¿Recordás como te convocaron para el personaje? ¿Qué sentiste?

Sí, claro que recuerdo cómo me convocaron. Fue a través de mucha insistencia mía y de mi representante Tommy Pashkus y su socio Gustavo Fischer, quienes me ayudaron mucho a conseguir este casting.

Yo era un actor que solamente hacía publicidades así que no se me conocía mucho, directamente nada. Por suerte tuve la oportunidad de que el director de casting Javier Braier me diera la posibilidad de mostrar mi trabajo.

Me convocaron para el papel de Maguila. Tuve que estudiar dos escenas. Fue un antes y un después en mi vida porque era un proyecto muy anhelado por mí. Implicaba trabajar con Guillermo Francella y con otro monstruo como es el director, Pablo Trapero en un proyecto muy grande que sabía que tenía una producción enorme. 

Yo no había hecho cine ni televisión, a excepción de un corto llamado "Superficie", que se emitió en Historias del INCAA. Esa era la única experiencia cinematográfica que había tenido, por lo que para mí era muy importante quedar seleccionado en el casting de 'El Clan'. 

Estaba ansioso, nervioso, feliz, de todo. No puedo poner en una palabra lo que sentí el fin de semana previo al casting. Un viernes me mandaron todo el material y me confirmaron el casting y el lunes a las 10 am tenía que estar haciéndolo. Me acuerdo que en ese momento vivía en Ramos Mejía. El casting era en Chacarita y a las 9 ya estaba en la esquina tomando un café, pasando letra. 

Ese fin de semana me había internado en mi casa a trabajar el personaje y averiguar sobre el caso Puccio y sobre Maguila. Fue una experiencia fascinante.

• ¿Qué sabías de Maguila Puccio y del Clan?

No sabía nada del caso. Tengo 27 años, y en el momento en que se me convocó al casting (en septiembre de 2014) tenía 21. En principio no sabía del caso por una cuestión generacional, yo nací en el 92, cuando ya habían sucedido los crímenes del Clan, y en mi familia jamás los escuché nombrar. Así que no tenía ni idea. 

Ese fin de semana que tuve para preparar el personaje previo al casting me sumergí en Internet, busqué sobre la familia Puccio y leí un montón de artículos y de archivos. Fue apasionante poder meterme en una historia tan emblemática del crimen argentino. Dolorosamente también, porque lo que hicieron fue terrible y a medida que iba leyendo no lo podía creer, verdaderamente no lo podía creer. Por momentos me parecía inverosímil, me preguntaba: '¿Cómo voy a actuar a un tipo que sabía lo que estaba pasando y no hizo nada?', '¿Cómo toda una familia era cómplice de esta locura?'. Fue realmente impresionante. 

• Considerando que se trataba de alguien real y que muchos lo conocieron ¿Cómo trabajaste y fuiste componiendo al personaje? ¿Tuviste que leer o investigar sobre la familia? 

Es una pregunta interesante. Al tratarse de un personaje de la vida real y del que justamente hablamos de su detención, con Pablo Trapero nos metimos mucho en el caso real. Él se ocupó minuciosamente de mostrarnos un montón de archivos, de datos de la familia, fotos, videos, nos hizo leer textos sobre el caso muy interesantes. Nos nutrió mucho, mucho, tanto a mí, como a Peter, a Lili (Popovich) y a Guillermo, a todos. Nos sumergimos bastante en el caso.

"No sé si Maguila era así o no y si ese era su vínculo con su padre. Ahí entra la composición artística y se comienza a jugar un poco con los datos que tenés. Fue realmente un proceso muy interesante", cuenta Cocchiarale.

Además, entre todos íbamos juntando y compartiendo anécdotas de gente que los conoció, y vecinos del barrio de San Isidro. Después, obviamente nosotros hemos creado una ficción. Nadie puede saber qué fue lo que sucedió dentro de esa casa. Así que a raíz de lo que nos iban contando, de lo que escuchamos y de lo que investigamos generamos esta ficción. No sé si Maguila era así o no, si ese era su vínculo con el padre, ahí entra la composición artística y se comienza a jugar un poco con los datos que tenés. Fue realmente un proceso muy interesante. 

• ¿Hablaste con algún familiar de víctimas para ayudarte a llevar a este personaje a escena?

Antes del rodaje no pero sí, después. Sé que antes de grabar la película, Pablo (Trapero) habló con los familiares. 

"Conocí a Guillermo Manoukian. Un tipo encantador. Uno hace ficción y de repente toparse con la realidad y el dolor de ese hermano y de la familia, fue realmente conmovedor", contó el actor que interpretó a Maguila.

Yo pude tener un encuentro después del estreno de la película. Así fue como conocí a Guillermo Manoukian, hermano de una de las víctimas que secuestró la familia Puccio. Me pareció un tipo encantador. Estuvimos hablando de todo lo que vivió, me contó detalles, me felicitó por la película. Fue muy fuerte. Uno hace ficción y de repente toparse con la realidad y el dolor de ese hermano y de la familia, fue realmente conmovedor. Una experiencia muy potente.

• En varias oportunidades comentaste tu admiración por Francella. ¿Cómo fue el encuentro? ¿Y trabajar con él? 

Fue muy lindo trabajar con Guillermo. Yo lo admiraba desde muy pendejo. Siempre vi sus películas, sus comedias, sus programas de televisión. Me acuerdo de estar ahí mano a mano con él haciendo una escena y mentalmente salir de esa situación pensando: "Estoy tirando texto con Guillermo Francella. Esto es una locura".

"Francella es un tipo al que admiro y respeto no sólo por el talento sino también por la calidad humana que ha tenido conmigo: me adoptó como un hijo y me lo hizo sentir desde el día uno, por lo que pudimos representar el vínculo padre e hijo", menciona Cocchiarale.

Particularmente trabajar con él fue un enorme placer. A partir de eso desarrollamos un vínculo de compañerismo, de mucha buena onda. Varias veces lo he llamado para pedirle consejos, tomar un café, ver cómo estaba. Es un tipo que admiro mucho y respeto no sólo por el talento sino también por la calidad humana que ha tenido conmigo desde el primer momento: me adoptó como un hijo y me lo hizo sentir así. Por eso también pudimos representar de manera tan orgánica el vínculo padre e hijo.

Hubo algo de eso fuera de la ficción, esa relación que él entabló desde el minuto cero y yo la tomé, como también lo hicieron Peter y los demás. Guillermo genera vínculos muy lindos y uno no puede hacer más que entregarse a eso. 

'El Clan' para mí fue un antes y un después en mi vida. Es uno de los proyectos más soñados que uno puede llegar a tener y a mí se me hizo carne, verdad en mi propia vida. Fue alucinante por todo los condimentos que reunió: ser dirigido por Pablo, la embergadura de la historia, el personaje que me tocó, trabajar con Guillermo y Peter, y más. Fue una maravilla.

• ¿Qué sentiste una vez que te viste en el cine interpretando esta historia?

Fue la culminación de un sueño. Verme en el cine, actuando esta historia con Guillermo, con Pablo. Mi familia, por supuesto, muy emocionada. Cuando vi la película sentí que todo ese sueño se había hecho verdad. Hasta el momento era una cosa medio onírica. Me decía: '¿Esto está pasando en serio?', '¿Estoy filmando esta película?'. 

Repito, yo no tenía nada de experiencia. No es el mismo Gastón que puede hablar ahora ya con quince películas hechas ("Claudia", "Luciferina", "Permitidos", entre otras), haciendo una tira diaria muy exitosa ("Argentina: tierra de amor y venganza"), haciendo teatro ("Esto es tan sólo la mitad"). Era otro el Gastón que estaba ahí: un pibe que recién arrancaba y no sabía muchas cosas.

"¿Qué más puedo pedir? Haber arrancado así fue entrar por la puerta grande o jugando en primera. Un sueño cumplido", reflexiona hoy el actor.

Además, se sumó que a la película le fue re bien, acumuló más de 3 millones de espectadores en la Argentina, en otros países la rompió. Ganó en el Festival de Venecia, recibió otros premios (Premios Cóndor de Plata, Festival de Fine Arts, Premios Sur y Premios Goya). 

¿Qué más puedo pedir? Haber arrancado así fue entrar por la puerta grande o jugando en primera. Un sueño cumplido. Estoy enormemente agradecido a la vida, a los que tomaron decisiones para que yo esté ahí, a mi representante, a Javi Braier por haberme aceptado para el casting, a Pablo, Guille, Peter. Fue alucinante vivir esa experiencia.

Gastón Cocchiarale actualmente interpreta a Lowestein en la tira diaria "Argentina: tierra de amor y venganza". Recuerda su gran primer estreno en el cine nacional en la piel de Maguila Pucchio y su encuentro con Guillermo Manoukian. Se solidariza con la familia de las víctimas del Clan y pide que la Justicia actúe ante el dolor y la impunidad.