El fútbol argentino suma un nuevo capítulo de violencia que parece no tener fin. Esta vez, el incidente lo protagonizaron los hinchas de Almirante Brown durante el encuentro del equipo de Isidro Casanova con Talleres de Remedio de Escalada por la Primera B Metropolitana.
Cuando transcurrían los primeros 10 minutos del encuentro, el partido debió ser suspendido por el árbitro José Carreras, cuando se comenzaron a registrar disturbios en la tribuna que habitualmente ocupa la Banda Monstruo.
Ante la situación que se terminó agravando con la participación de la Policía Federal para intentar "dispersar" a los violentos, se resolvió suspender el encuentro, tras la confirmación del titular de la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (APreViDe), Juan Manuel Lugones.
Mientras el resto de la hinchada de Almirante Brown gritaba "que se vayan todos", fuera del estadio el enfrentamiento entre hinchas y efectivos fue mayor y terminó dejando como resultado más de diez heridos.
Un nuevo capítulo de violencia se apodera en el centro de escena del fútbol argentino y desde el club temen que los partidos hasta la finalización del torneo sean a puertas cerradas, y que la posible sanción se extienda.